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•Disputa por alcaldía
•Líderes miden fuerza
Luis Velázquez
21 de noviembre de 2020
DOMINGO
Lucha azul de testarudos
La elección de candidatos a presidentes municipales en el PAN echa chispas. Faltan unos 4, 5 meses, pero como dice el politólogo Carlos Ronzón Verónica, ninguna elección se cocina de la noche a la mañana.
Y de los 212 candidatos a alcaldes en el CDE del PAN, el profeta del barrio dice que en la franja Veracruz-Boca del Río hay choque de trenes.
Un trío de políticos testarudos, tercos y obstinados, bragados se enfrenta.
Uno, Miguel Ángel Yunes Linares. Dos, Julen Rementería. Y tres, Joaquín Guzmán Avilés, el presidente.
Los primeros dos, por sus hijos. El tercero, el árbitro, aun cuando unos panistas sienten, creen, están seguros, convencidos, de que Julen se adueñó de las neuronas, el corazón y el hígado de Guzmán Avilés.
Y por tanto, lleva, o llevaría mano para inclinar la balanza por su hijo, Bingen, el diputado local que ahora sueña con el cargo público siguiente.
Lo indicativo y significativo es que además de las alcaldías están en juego par de curules locales (uni y pluri) y una curul federal en Veracruz y una local y otra federal en Boca del Río.
Es decir, 5 ofertas más para los hijos y aliados. Pero tanto Julen como Yunes están emperrados en la alcaldía jarocha.
Por eso, la rebatinga. Mil 400 millones de pesos de presupuesto anual son demasiada tentación.
LUNES
Líderes miden fuerza
Algunos escenarios son los siguientes:
El fuego amigo y enemigo y adversario entre Julen y Yunes ha trascendido tanto que, por ejemplo, y de acuerdo con las versiones, el CEN del PAN de Marko Cortés ha convocado la leyenda de Poncio Pilatos y pedido una palangana con agua limpia y jabón y “se ha lavado las manos”.
Y, por tanto, que decida el CDE del PAN Veracruz.
Incluso, la guerra de las encuestas, encuestitas, mentiras y chingaderas como decía Fidel Herrera Beltrán se ha recrudecido.
En unas, que Bingen va por encima del trío de candidatos de Yunes, a saber, el primogénito, la diputada local, María Josefina Gamboa, y la senadora Indira Rosales San Román.
Y en otras, que hay un empate entre Bingen y Miguel Ángel Yunes Márquez, en tanto la diputada y la senadora fueron rebasadas.
Y la versión que, al fin testarudos y tercos, ninguno cederá. Julen, como buen vasco. Yunes, como buen musulmán.
En medio estaría la solución salomónica de Guzmán Avilés de poner tache a los dos y dejarlos fuera.
Al menos así, trasciende, siente y presiente el presidente del CDE del PRI, Marlon Ramírez, para lanzar a una mujer priista al palenque, la diputada federal, Anilú Ingram.
Claro, en alianza con el PAN y PRD.
MARTES
El Día D…
Con bajo perfil, los presidentes de los CDE del PAN, PRD y PRI tejen y destejen la alianza para lanzar candidatos a las alcaldías y diputaciones locales.
Por lo pronto, en sus tribus hay bastante optimismo, buen karma, mejor vibra, porque sienten que se está dando.
Según versiones, irían juntos en unos sesenta municipios y en el resto, donde cada quien es fuerte y sostiene y mantiene el liderazgo, solos.
De ser así, la ley y/o el reglamento panista es claro: si hay una alianza con otros partidos, entonces, el presidente del CDE está facultado para elegir el candidato, más allá de la encuesta y el liderazgo popular, social, político y partidista de cada uno.
Entonces, los azules sienten que Guzmán Avilés se inclinaría por Bingen Rementería como candidato a la alcaldía jarocha.
Pero…, digamos, de ser así, ¿los Yunes aceptarían la decisión de El Chapito?
Más aún: ¿aceptarían que Bingen fuera el candidato a la alcaldía jarocho en tanto El chapito les dejara libre el camino para elegir a los candidatos a diputado local y federal en Boca del Río?
O al revés, ¿si el candidato de Yunes Linares a la alcaldía jarocha fuera palomeado, Julen y asociados aceptarían la decisión?
MIÉRCOLES
Rara y extraña alianza…
Se ignora si sea cierto, realidad o ficción, mitad ficción o mitad realidad, el caso es que un trascendido es el siguiente:
Yunes Linares está mirando vientos huracanados con las candidaturas panistas a Veracruz y Boca del Río.
Su relación con Joaquín Guzmán Avilés está tronada y ninguna posibilidad de reconciliación, aun cuando algunos dicen que ya le están enviando flores a El chapito.
Pero al mismo tiempo camina otra versión, la siguiente:
Que Yunes Linares y Dante Delgado Rannauro, fundador y gurú del Movimiento Ciudadano, están en pláticas para llevarse a sus tribus azules ante la inminente ruptura con el PAN.
Claro, en el tendedero público, el líder estatal del MC anunció que irían solos porque son fuertes, ajá.
Pero, bueno, con todos y la historia de lejanías, espinas y cardos entre ambos, en la conquista del poder todo es posible.
JUEVES
Jugada yunista
Otro escenario es el siguiente:
Par, trío de semanas anteriores se registró cargada mediática por Miguel Ángel Yunes Márquez como prospecto para la alcaldía jarocha.
Los lectores de señales refieren que se trató de una jugada de Yunes para presionar a El Chapito y a Julen para que desistan de su candidato Francisco Gutiérrez a la presidencia de Boca del Río, el feudo y la parcela familiar, el paraíso terrenal, la tierra prometida, el búnker de la yunicidad.
Incluso, hasta acariciando la posibilidad de que el primogénito sea candidato a Boca del Río por tercera ocasión por encima del diputado local, Juan Manuel Unanue, quien desde hace ratito picotea alborotado en el palenque.
Y más, cuando de pronto, el alcalde Humberto Morelli, peleado a muerte con Unanue, promueve a su candidato, a saber, Jaime de la Garza, director de Desarrollo Social en el Ayuntamiento y quien fue secretario particular de Yunes Linares como gobernador.
Por eso mismo, De la Garza anda, mesiánico, regalando comidita en las colonias populares disputando el estómago de los pobres con otro aspirante, el empresario Ricardo Cuevas, dueño de Los jaibones, mostrándose, además, en los espectaculares y en las revistas del corazón, frívolas, sabadabas y fifís.
VIERNES
Rebatinga por lana oficial
La lucha Yunes y Julen mira hacia el año 2024 cuando la elección de los candidatos a la gubernatura.
Por una sola razón: Julen la quiere y Yunes también para cualquiera de dos de sus tres hijos.
Y más allá de la 4T, la purificación moral y la honestidad valiente, un presupuesto, aprox. de mil 400 millones de pesos anuales del Ayuntamiento de Veracruz alcanzan lo suficiente para financiar cualquier campaña a jefe del Poder Ejecutivo Estatal.
Sean panistas, priistas, perredistas y morenistas, anexos y conexos, y aliancistas, incluso, nuevos partidos (4 más en Veracruz), quienes estén al frente.
Más en el tiempo que corre cuando Morena se ha adueñado de casi todas las pelotas con la profecía de las encuestas, encuestitas, mentiras y fregaderas de que el partido de López Obrador ganará trece de las quince gubernaturas y la mayoría de los 500 diputados federales a mediados del año entrante.
PAN, PRI, PRD y los otros, fuera de la silla embrujada del palacio necesitan financiarse. Y nada mejor que “ordeñar la vaca suiza” ante el discurso purificador de MORENA.