Veracruz: tierra fértil para el crimen organizado

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POR NOÉ ZAVALETA/FOTOS CAROL SUÁREZ

TOMADO DE PROCESO

PRIMERA PARTE

El crimen organizado ha encontrado en esta entidad tierra fértil para sus actividades: En lo que va de la administración de Javier Duarte, las fuerzas armadas han desmantelado tres campos de adiestramientos de Los Zetas y encontrado ocho cementerios clandestinos.

La primera escuela zeta fue descubierta en el municipio de Carrillo Puerto en noviembre del 2012. En ese entonces, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) descubrieron que el rancho “San Francisco” y/o “La Leona”, ubicado por las montañas de Cotaxtla, operaba como centro de capacitación de esa organización delictiva.

En el operativo, los militares decomisaron 22 armas largas, cartuchos de diversos calibres, miles de municiones, cientos de cargadores, lanzagranadas, cuatro camionetas y uniformes especiales para camuflaje en la maleza. En una parte del predio, los Zetas instalaron su propio campo de tiro y contaban además con tecnología de punta para rastrear y grabar llamadas telefónicas. No hubo detenidos en esa ocasión.

El segundo narco-rancho fue encontrado el pasado 1 de septiembre en cumbres de Acultzingo, en la carretera federal que conduce de Orizaba a Tehuacán, Puebla. De lo que se halló en este sitio no se dio mayor información ni tampoco se habló de detenidos.

Este sitio se encuentra en la congregación de Sierra de Agua, escondido entre frondosos árboles, viviendas rurales y tierras de cultivo de girasoles, entre otras plantas ornamentales.

En esa población no hay más de mil habitantes, 15% de los cuales sólo hablan el náhuatl.

Este sitio era utilizado para adiestrar a jóvenes y policías que trabajaban para los zetas.

El tercer centro de adiestramiento se desmanteló días después, el 23 de septiembre en el rancho San Pedro. El hallazgo de esa escuela zeta fue fortuito, luego de que una camioneta de lujo con reporte de robo se atascó entre el lodo en medio de la selva de Tihuatlán. Esto despertó la sospecha de elementos del Ejército y de la SSP que al momento de indagar descubrieron el centro de adiestramiento en el norte de la entidad.

Al dar parte a sus superiores se armó un operativo que dejó un saldo de cinco presuntos sicarios muertos, dos heridos y 14 detenidos. Una fuente militar reveló que la mayoría de las personas que vivían en ese rancho tenían un promedio de edad de 17 a 24 años.

En el parte militar, los detenidos revelaron que en ese lugar los enseñaban a cavar fosas clandestinas sin dejar huellas, a “tablear” a sus víctimas, a disparar, a torturar y a matar.

 

“Rancho San Pedro”

Enfrente de la escuela primaria “Leona Vicario”, sobre una angosta privada de viviendas de madera y cubierto por frondosos árboles, se encuentra el rancho “San Pedro”, el centro de adiestramiento Zeta de las montañas de esta entidad.

Este reportero recorrió el rancho 24 horas después de que fuerzas federales detuvieron a 31 personas y abatieron a tres más. La casa principal no tiene sellos de clausura ni tampoco está bajo la vigilancia de la policía.

La entrada al recinto es por demás lúgubre. En la fecha de la visita, en el lugar todavía había huellas de la refriega entre fuerzas castrenses y delincuentes. Zapatos y ropa con manchas de sangre, maleza aplanada por la caída de cuerpos, así como sillas y otros accesorios en el suelo en completo desorden.

Dentro del rancho hay tres inmuebles: Una vivienda azul de tres piezas con ventanas polarizadas y una puerta de fina madera, sobre su pared lateral, una leyenda en letras negras presume el nombre del terreno.

Además, un inmueble en obra negra, con una fosa séptica en condiciones insalubres que era utilizado como celda de castigo o para el resguardo de personas secuestradas. El parte policial estatal indica que ahí fue “encontrada” una persona “esposada” y “vendada” del rostro. Su identidad no fue dada a conocer.

La otra edificación es un enorme galerón, recubierto con una malla ciclónica y alambre de púas. En ese sitio se encontraban las armas que fueron aseguradas por fuerzas castrenses. Al final de la edificación azul hay una pila de lavaderos y en la parte trasera, otros insumos para el adiestramiento.

El reportero y sus acompañantes intentaron avanzar, pero un sujeto frenó su marcha al gritarles “¿a quién buscan?, ¿a quién buscan?, aquí ya no hay nada, ya no hay nada…váyanse”.

Vecinos de Sierra de Agua, ubicada a 4 kilómetros de la cabecera municipal detallan que la tarde del lunes 23 de septiembre, ese rancho fue sitiado por fuerzas federales y estatales.

“Sólo veíamos como sacaban un montón de detenidos”, relata una señora.

“Estuvo bien grueso”, agrega otra.