“Así como una jornada bien empleada produce un dulce sueño,
así una vida bien usada causa una dulce muerte.” Leonardo da Vinci
México es un país con una cosmovisión única respecto a la muerte, desde los rituales del México prehispánico, hasta las ceremonias de la colonia, se nos ha enseñado que la muerte es el paso final en el proceso de vida, y el comienzo de la trascendencia a la vida eterna.
Los rituales funerarios dependen de las creencias religiosas, la cultura y las posibilidades económicas del difunto, sin embargo, el entierro, es la forma más común en que la humanidad ha despedido a sus seres queridos desde hace miles de años. De hecho este acto es reconocido como uno de los primeros rituales de la civilización humana.
Este año, en el corazón del bosque mesófilo de niebla de la región Coatepec-Xalapa, en la localidad de “La Herradura”, en el km 3.5 del camino a Cinco Palos, nació “Bosque de Vida”, el primer memorial ecológico en el estado de Veracruz, que aunque no es el primero en el país (Puebla, Chihuahua y Estado de México, son los antecesores), sí es el primero a nivel nacional en implementar un programa de trascendencia forestal.
Es decir, espacios destinados a la plantación de un árbol y plantas endémicas del bosque de niebla, donde los restos humanos incinerados dentro de una urna 100% biodegradable se convertirán en parte importante de la germinación de un árbol incorporándose al ecosistema. ¿Te imaginas volver a abrazar a tus seres queridos y reforestar tu entorno?
Crónica de Xalapa, entrevistó a Fernando Olivares, director general de Bosque de Vida, quien nos platicó cómo surgió hace dos años su idea emprendedora de jóvenes coatepecanos que buscan generar una cultura funeraria completamente diferente a lo que estamos acostumbrados.
“Somos los primeros en dar un plus al servicio que es el acompañamiento tanatológico, que se ha diseñado con psicólogos y tanatólgos que ayudan a nuestros clientes en el proceso de la pérdida de un ser querido, y lo más importante que ofrecemos es el crecimiento de una nueva vida, que son los árboles”, nos cuenta Fernando.
Los servicios funerarios en el parque, varían en precios desde los 5mil a los 30 mil pesos, ofreciendo además la modalidad de meses sin intereses.
Fernando comenta que buscan “insertar este chip de prevención” , es decir dejar todo listo para cuando nos toque la hora de partir. Intentan promover la cultura de prevención, donde las personas, puedan dejar dicho a su familia donde desean que reposen sus restos el día de mañana.
“La muerte es algo que vivimos todos los días, no siempre de manera directa , pero es una necesidad humana y profesional que todos los sectores industriales y de servicios, renovemos estas practicas con el fin de reducir el impacto negativo que durante mucho tiempo han tenido en nuestro ambiente”, señala Fernando.
Y es que ellos se dieron cuenta cómo el sector funerario ha estado estancado durante mucho tiempo en lo mismo, y al detectar esta oportunidad de mercado, crearon una opción diferente y muy significativa de despedir a quienes parten, con una forma única de recordarlos.
La cremación es el proceso inicial que necesitas para ingresar a Bosque de Vida, y a pesar de que aún hay ciertas reservas alrededor de ella, el proceso de incineración ya ha sido aceptado desde hace tiempo por las diferentes religiones mas profesadas por la sociedad.
Debido a la pandemia de Covid-19, la demanda de servicios funerarios en la entidad incrementaron, y eso los orilló a acelerar sus planes y abrir antes de lo previsto, por lo que empezaron desde agosto a aperturar el parque por zonas, para poder ser una opción funeraria en estos tiempos delicados.
Aplican los protocolos establecidos por la Secretaría de Salud, siempre cuidando a su personal y las familias que acuden a solicitar sus servicios, no se permiten velaciones, son cremaciones directas.
“Los crematorios estuvieron saturados en meses pasados, pero actualmente hay una reducción de casi 70 por ciento de las defunciones por Covid19, por lo que los hornos crematorios ya no están saturados”, agrega Fernando.
Todos los servicios de el memorial ecológico forman parte de un programa de reforestación que contempla la inserción de miles de especies arbóreas en su primera etapa para así reintegrarse al bosque mesófilo de montaña que rodea la zona, con el objetivo de que al llenar el cupo de cada sección nazca un ecosistema, mismo que al finalizar cada etapa del proyecto será destinado a una reserva ecológica.
“No es sólo escoger un servicio funerario, sino insertar un chip ecológico en las familias que optan por esta opción, ya que trasladar una situación crítica como la muerte de un ser querido al desarrollo de una nueva vida, inserta en las nuevas generaciones una nueva manera de ver nuestro entorno, y un sentido de protección único que es tan necesario en nuestros tiempos”, finaliza el director del memorial.