El presidente de la Comisión de Comunicaciones en el Congreso Local, Joaquín Guzmán Avilés advirtió que las cuentas de daño patrimonial en los resultados que entregó el ORFIS simplemente no cuadran, pues mientras el ente fiscalizador encontró un presunto daño patrimonial de 267 millones de pesos en la extinta Secom; el ex secretario de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP), Gerardo Buganza reconoció en tribuna en mayo del 2014
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“Es importante saber, como dicen por ahí: ¿donde quedo la bolita?, hay datos que están fuera de la realidad”.
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A dos días de que el Congreso Local y la Comisión de Vigilancia aprueben o rechazan el informe de resultados de la Cuenta Pública 2013 entregado por el Órgano de Fiscalización (ORFIS), algunos diputados siguen cuestionando las inconsistencias e irregularidades que se aprecian en lo que entregó el máximo auditor del Estado y lo que se palpa en la realidad.
Joaquín Guzmán Avilés, presidente de la Comisión de Comunicaciones expone que en el caso de la extinta Secretaria de Comunicaciones, disuelta en el 2014, el hoy ex titular de la Secretaria de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP), Gerardo Buganza aseguró en tribuna (mayo del 2014) que “había un fraude de dos mil millones de pesos”, en contraste el ORFIS apenas encontró un faltante de 267 millones, 919 mil, 686 pesos.
Ese presunto daño patrimonial que encontró el ente fiscalizador en los recursos que administró la extinta Secom fueron detectados en el Fideicomiso Público Irrevocable y Fuente de Pago para la Operación, Explotación, Conservación y Mantenimiento del Puente Coatzacoalcos I y del Túnel Sumergido de Coatzacoalcos, así como la extinta Secom en sus Direcciones de Comunicación e Infraestructura Complementaria, de Caminos Rurales y de Obras Públicas.
“Hay están las inconsistencias, Buganza lo dijo en tribuna, está grabado y aludía a cuentas del 2013 y el ORFIS nos entrega otra cosa, hay que ver y revisar esa situación”, expresó Guzmán.
Añadió que la falta de equilibrio entre lo que se dijo y lo que entregó el ORFIS en su Cuenta Pública da pie para “revisar” que hay en las demás dependencias, no solo en SIOP, sino en la Secretaria de Salud y Educación.
“Creemos que hay varias cosas, varias anomalías que no se reflejan. Es importante saber ¿donde quedo la bolita?, hay datos que están fuera de la realidad. Maquinaria que no sabemos donde esta, mobiliario que no se inventario, obras que no están terminadas”.
En mayo pasado, Gerardo Buganza Salmerón, entonces secretario de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP) durante su comparecencia en el Congreso local reconoció que la obra del Túnel Sumergido –supervisada por la extinta Secom- estaba plagada de irregularidades. Las principales: desvío de recursos, fallas estructurales, hundimientos y soportes mal hechos.
Por esa razón, diversos funcionarios –del anterior sexenio y del actual–, así como representantes de la empresa Concesionaria Túnel de Coatzacoalcos, S.A. (Cotuco) y de la española FCC Construcción, se encontraban sujetos a investigaciones en los fueros común y federal. A partir de tales hechos, Buganza Salmerón equiparó la obra del Túnel Sumergido con la Estela de Luz y la Línea 12 del Metro.
Incluso, acusó a las empresas contratistas –CAABSA, Concesiones Viales, Obras Portuarias de Coatzacoalcos y Matrix C.V. (agrupadas como Cotuco) yFCC Construcción–, de ser unos “bribones” al pretender llevarse dinero del erario, en colusión con servidores públicos.
Ese día, quien fungía como titular de la SIOP pidió a los diputados de oposición “tener fe” en que el gobierno de Duarte recuperará el “recurso desviado”, legisladores de PAN y PT dudaron de su palabra. El petista Fidel Robles aseguró que el gobierno de Duarte y el anterior de Fidel Herrera “se pusieron de rodillas” ante el capital español al someterse a sus lineamientos, pese a que dicha empresa ha mostrado su incapacidad para culminar la obra magna, la cual debió concluirse en 2010.
Sin embargo, en diciembre pasado, Buganza presentó su renuncia a la SIOP para regresar a encargarse de la política interna de la administración estatal, en la Secretaria de Gobierno.