Vecinos planean instalar cámaras por robos en colonia Isleta 

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FOTO: DAVID ARCOS.
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Al menos ocho viviendas han sido saqueadas en las calles Primero de Septiembre, 2 de Septiembre y 13 de Septiembre

Vecinos de la colonia Isleta planean instalar cámaras de videovigilancia, ante la ola de robos a casa habitación que se ha registrado en los últimos meses.
[quote]“Zona protegida por vecinos vigilantes. ¡Cuidado!, te estamos observando. Alto a la delincuencia. Si te agarramos te atienes a las consecuencias”, se lee en lonas que colocaron sobre las fachadas de sus casas.[/quote]
Al menos ocho viviendas han sido saqueadas en las calles Primero de Septiembre, 2 de Septiembre y 13 de Septiembre.
Frente a estas calles se encuentra la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) de la Universidad Veracruzana (UV), donde hay vigilancia permanente.
De acuerdo con Marisol Tejada Castellanos, vecina de la zona, las lonas fueron colocadas desde hace aproximadamente un año.
“Hay muchos estudiantes, los pocos vecinos se juntaron, se reunieron y acordaron poner las lonas, también estamos viendo lo de las cámaras».
Desde entonces, la incidencia delictiva ha disminuido de manera considerable en la colonia Isleta.
 

Crecen atracos en vacaciones 

Sin embargo, al tratarse de una zona universitaria, en cada periodo vacacional, los delincuentes aprovechan que los arrendadores no se encuentran en sus departamentos, para saquearlos.
“También cuando hay algún puente o días de descansa ocurren los robos”, añade la vecina.
La presencia policiaca es casi nula en la mencionada colonia. Sólo acuden a la zona cuando los vecinos reportan algún robo.
La gente colocó herrería en puertas y ventanas de sus casas, también candados, cadenas y chapas de alta seguridad.
De enero a junio, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) registró 952 robos a casa habitación en la entidad veracruzana.
Del total de casos, 260 fueron con violencia y 692 sin violencia.
Lo anterior, muestra que los delincuentes prefieren esperar a que no haya personas en las viviendas para cometer los atracos.