- ”Las chachas” se organizan
- Salarios justos y dignos
EMBARCADERO: Una revolución laboral ha iniciado en el país… La rebelión y organización de las trabadoras domésticas… A partir de la fecha, todas, pero más aún, las patronas, estarán sujetas a la Ley Federal del Trabajo… Y han de pagar un salario justo y con las prestaciones económicas, sociales y médicas garantizadas en la ley… Todavía más, el aguinaldo y la capacitación en tiempo y forma… Y aun cuando habrá patronas que por ahora cubran el aguinaldo, otra cosita es que ha de apegarse a la ley, es decir, con justicia social… El anuncio ocurrió el fin de semana en la Ciudad de México, en que “las chachas” (dígase con cariñito) revelaron la propuesta del contrato colectivo de trabajo como el primer gran logro, fuera de serie, del llamado Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar, Sinactraho, y que por lo pronto, incluye a 6 de 4 entidades de la nación, entre ellos, la Ciudad de México, el estado de México, Puebla y Colima… Pronto, ojalá, se incorporarán las mujeres de otros rincones de la república para que a todas ellas se les haga justicia… En tales estados los salarios quedarían de la siguiente manera… 250 pesos diarios para el trabajo básico de aseo de la casa… 350 pesos, cuando, además, se incluya, por ejemplo, el lavado de la ropa… 450 pesos, cuando se agregue el cuidado de los enfermos… Y 550 pesos cuando se añada la preparación de los alimentos de la familia… Es decir, si una doméstica atiende todas y cada una de las tareas anteriores, simple y llanamente, ganará unos 17 mil pesos mensuales… Más aún, el simple hecho de que sólo sea contratada para el trabajo básico significa que a partir de la fecha deberá percibir 7,500 pesos al mes, y que por lo pronto, en ningún hogar de norte a sur y de este a oeste de Veracruz es cubierto…
ROMPEOLAS: Se trata de una revolución laboral sin precedente… Quizá, y por el estremecimiento económico y social que originará podría, digamos, cotejarse con la gran resistencia pacífica pero llena de firmeza cuando en el puerto jarocho, el líder inquilinario, Herón Proal, encabezó un movimiento con los vecinos de los patios de vecindad para luchar contra los casatenientes que a cada rato les subían la renta mensual… Entonces, y por ejemplo, el gobierno del Estado lo encarceló y fue liberado luego de una manifestación encendida y apasionada… Salió de la cárcel y de inmediato se le unieron las trabajadoras sexuales que vivían en los patios de vecindad, y en donde ofrecían sus servicios… Todas ellas, sacaron los colchones de sus camas a las calles y les prendieron fuego recrudeciendo el movimiento… Proal, amigo de los hermanos Ricardo, Enrique y Jesús Flores Magón, los grandes opositores de Porfirio Díaz Mori, logró congelar las rentas y aquel movimiento triunfó… Ahora, ya se verá la resistencia pacífica que las trabajadoras domésticas iniciarán, pues a primera vista resulta inverosímil que tales salarios sean cubiertos por las patronas… Bastaría referir que “la chacha” que menos ganara al mes (7,500 pesos) percibirá un salario 50 por ciento más arriba del salario habitual de un reportero, un fotógrafo, un camarógrafo y/o un editor de los medios de comunicación en Veracruz, que por lo regular oscilan entre los 5 mil a 6 mil pesos… Y más, porque en la mayor parte de los medios radiofónicos, por ejemplo, les pagan a destajo según el número de noticias que lleven por día siempre y cuando sean transmitidas al aire…
ASTILLEROS: El sindicato de las trabajadoras domésticas logró, además, lo siguiente… Por aquí sean contratadas habrán de firmar un contrato colectivo de trabajo… Y entre las cláusulas figura, por ejemplo, que recibirán cursos de capacitación durante sus horas de chamba… Incluso, y para evitar confusiones, en la llamada letra chiquita asientan que las patronas también deberán participar en tales cursos, en nombre, digamos, de los derechos humanos para lograr una relación armónica, apegada a la ley y a la justicia social… Todavía más: en caso del fallecimiento de los padres o hijos de todas ellas, las patronas deberán otorgar tres días de permiso con goce de sueldo… Más aún: si la trabajadora doméstica se embaraza, queda prohibido el despido… La ley contempla que se irá a su casita en tiempo y forma, dará luz, amamantará unos días al hijo y luego regresará a la chamba… En contraparte, “la chacha” se compromete a mantener en buen estado los utensilios del hogar, pero lo más importante, “guardará los secretos de la familia” bajo la inteligencia de una causa penal… ¡Ah!, la jornada laboral será de ocho horas, ni un minuto más, ni un minuto menos, para que así todas ellas tengan derecho a su vida personal, a su vida familiar, a su vida privada y a su vida clandestina…