El sitio más paisajístico de la ciudad, el paseo más representativo de los xalapeños, ha sido convertido, con la complacencia del Municipio, en un sucio y permanente tianguis.
TEXTO Y FOTOS: ALEJANDRO HERNÁNDEZ Y HERNÁNDEZ
Independientemente del gran número de vendedores que domingo a domingo invaden el Paseo de Los Lagos, desde mayo, so pretexto de una pretenciosa feriecilla llamada “Expoferia de Xalapa”, se instalaron decenas de puestos entre el segundo lago y “El águila” los cuales, una vez concluida ésta, ya no se fueron. Hoy el paseo más distintivo de Xalapa, el que ha sido la imagen de la ciudad desde su creación en el mandato de Rafael Murillo Vidal, se encuentra convertido en un tianguis horrible, sucio e indigno para la capital de Veracruz. Pero no tiene la culpa el indio sino el que lo hace compadre, dice el dicho, y en este caso es el Municipio el que ha permitido esta invasión que ya amenaza con ser permanente y que denigra sobremanera la dignidad de este tradicional paseo. Los puesteros ensucian, se roban la energía eléctrica, pues han colocado decenas de “diablitos” de la instalación del alumbrado del paseo, circulan con camionetas por los andadores y han convertido una parte de éstos en su estacionamiento particular.
El Ayuntamiento sabe y permite todos estos abusos pues en las fotografías que ilustran este fotorreportaje se puede ver a uno de los inspectores, el cual portaba papeles membretados del Ayuntamiento, cobrando el famoso “derecho de piso”, cobro con el que se amparan los ambulantes para “crear derechos” en los lugares que invaden y, con el tiempo, para no querer irse de ellos.
Ofensivo resulta para los xalapeños que el Ayuntamiento permita y solape este cínico despojo a las familias de un paseo peatonal por excelencia y por el cual, según se ve en las fotografías, mero ya no se puede ni caminar, mucho menos andar en bicicleta o hacer ejercicio.
Urge la formación de un patronato para rescatar este sitio emblemático de las garras de los líderes de vendedores y de los funcionarios municipales que los solapan. ¿Américo Zúñiga Martínez sabrá de esto o lo ignorará, como parece ignorar tantas otras cosas irregulares que ocurren en la ciudad?
Comentarios y sugerencias: motardxal@gmail.com
CON LOS PUESTOS ABIERTOS
Así recibe Xalapa a sus visitantes, con sus parques y paseos convertidos en vulgares tianguis.
PROMOVIENDO LAS BELLEZAS DE LA CIUDAD
Ahí, detrás de las sombrillas de los puestos de fritangas y comida chatarra se pueden ver, si se pone atención, carteles alusivos a los atractivos de Xalapa.
Árboles y paisaje son tapados por los puestos de una “feria” que, literalmente, llegó para quedarse.
PELIGRO LATENTE
Quizá lo que espera el Municipio es que ocurra una desgracia para meter al orden a tanto vendedor informal en los parques y paseos de la ciudad.