Vecinos denunciaron omisiones en funciones de la Comisión Municipal de Agua de Emiliano Zapata. El drenaje a cielo abierto podría provocar enfermedades.
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«Es un olor muy penetrante, se ve el agua estancada y puedes percibir un olor a putrefacción».
PATRICIA JUÁREZ GARCÍA
VECINA
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Ríos de aguas negras y un drenaje a cielo abierto podrían generar un foco de infección en el fraccionamiento Lomas de Miradores del Mar, ubicado en el municipio de Emiliano Zapata. Los cobros excesivos por parte de la Comisión Municipal del mencionado lugar resultan una “burla” para los vecinos.
Durante los últimos cuatro años, el drenaje sale de las alcantarillas y desemboca en un campo, donde hay ganado.
Hace dos meses las autoridades municipales realizaron una obra para evitar que las aguas negras contaminaran las calles; sin embargo, ésta no solucionó el problema.
“Pusieron un ducto que encausa el agua a la orilla de la carretera, debieron haber hecho eso para sumarlo a alguna red hidráulica. La obra sólo oculta el problema, ahora los conductores no pueden observar el drenaje a cielo abierto pero si pasas caminando la realidad es otras”, dijo Patricia Juárez García, vecina de la calle Malinche.
Es evidente la contaminación al medio ambiente en el camino a Rancho Viejo, lugar donde concluye dicho fraccionamiento.
Los habitantes de la zona temen que pueda desencadenarse un foco de infección que provoque enfermedades.
“Es un olor muy penetrante, se ve el agua estancada y puedes percibir un olor a putrefacción. Acostumbro salir a correr por el lugar y es insoportable, me sorprende que cobren tanto por el servicio de agua y no puedan atender dicha problemática que es alarmante”, añadió Juárez García.
En ese sentido, comentó que hace tres meses personal de la Comisión Municipal de Agua de Emiliano dejó un recibo en su domicilio, instaló el medidor (no lo tenía hasta ese día) y limitó el servicio; debía pagar 4 mil 500 pesos para que se restableciera el mismo.
“Lo tuvimos que pagar de manera forzosa, no sabemos cómo hicieron el cálculo porque no teníamos medidor, esto es un robo. Estamos pagando 200 pesos de manera mensual más el consumo, para ir abonando a esa deuda que no sabíamos que teníamos”, apuntó.
Cabe recordar que el año pasado se limitó el servicio a los pobladores durante un mes, debido a que se había averiado la bomba de agua. Los afectados tuvieron que pagar a las pipas para que llenaran sus tinacos.