La exhumación de restos humanos en fosas clandestinas de Veracruz

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Hay miles de restos humanos sin identificar en la entidad

Fabiola Pensado Barrera acudió el pasado viernes 29 de octubre a la fosa clandestina del predio La Guapota, en el municipio de Úrsulo Galván, para participar en la exhumación de restos humanos.

Ella busca a su hijo Argenis Yoshimar Barrera Argenis Yoshimar Pensado Barrera, quien salió de casa la mañana del domingo 16 de marzo de 2014, pero no volvió.

Desde entonces ha emprendido una incansable búsqueda para encontrarlo con vida. Ya han pasado siete años y su esperanza por hallarlo en esa situación se ha ido agotando.

El cementerio clandestino de La Guapota, ubicado a dos kilómetros de la playa Chachalacas, un importante atractivo turístico, fue localizado en abril de 2019 y es considerado el más grande de la entidad.

Fabiola ha participado en los trabajos que se han realizado en el sitio. Apenas la semana pasada fue reactivado el plan de recuperación de los restos óseos.

“Se está siguiendo ese protocolo y las familias vamos como observadores a ese predio que es grandísimo”, comenta.

LENTA IDENTIFICACIÓN

Las osamentas que son exhumadas posteriormente son llevadas a laboratorios para su identificación mediante pruebas de ADN.

Hasta el momento, han sido detectadas 77 fosas clandestinas en dicho predio de la zona costera central del estado; sin embargo, los trabajos han sido lentos.

También han sido intervenidos 26 puntos por parte de personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Comisión Estatal de Búsqueda.

Fabiola Pensado desconoce cuántos restos humanos han sido extraídos, pero cinco personas han sido identificadas y tres de ellas ya han sido entregadas a sus familias.

“En algunas fosas han encontrado uno, otros tres y la mayor tuvo cinco restos”, relata la madre de Argenis Yoshimar.

Comenta que han sido pocas las pertenencias encontradas; solo ha habido credenciales y ropa que permitirán saber de quién se trata.

La zona que seguirá siendo intervenida en los próximos días es resguardada por elementos de la Policía Ministerial.

“Es una zona muy apartada, hay vigilancia y Periciales indican que sí hay resguardo. Hasta la fecha no se ha detectado una alteración (en las fosas clandestinas)”.

MENOS DEL 50% INTERVENIDO

Carlos Saldaña Grajales, también del colectivo Familiares Enlaces Xalapa, menos del 50 por ciento de la zona ha sido explorada para la exhumación de los restos humanos.

“Aquí en Chachalacas, en la zona de La Guapota, es el punto más relevante que tenemos ahorita. Está asegurada la zona, no se está trabajando todavía. Tenemos que reanudar porque son muchos cuerpos los que se han encontrado y todos esos puntos que marcamos en la primera búsqueda que hicimos han salido positivos”.

Él busca a sus hijos Karla Nallely Saldaña Grajales y Jesús Alberto Estrada Martínez, quienes desaparecieron el 29 de noviembre de 2011, en la zona de antros de Xalapa.

Cabe recordar que, en octubre del año pasado, la Subsecretaría de Derechos Humanos y Población de la Secretaría de Gobernación ubicó al estado de Veracruz en el primer lugar nacional con más fosas clandestinas halladas en el periodo de 2006 al 30 de septiembre de 2020.

El Registro Nacional de Fosas Clandestinas y Cuerpos Exhumados reportaba que en esta entidad se habían identificado 504 fosas clandestinas. El reporte también exhibía a los diez municipios del país con mayor incidencia de esta inhumación ilegal.

Dos municipios de Veracruz se encontraban en dicha situación. Se trata de Úrsulo Galván y Playa Vicente. El primero ubicado en la región Sotavento y, el segundo, en la zona sur de la entidad.

MILES SIN IDENTIFICAR

María Elena Gutiérrez busca a su sobrino Rafael Espinosa Gutiérrez, desaparecido desde el 15 de agosto de 2013.

Ella forma parte del colectivo Buscando a Nuestros Desaparecidos y Desaparecidas Veracruz, y menciona que en la entidad hay más de 15 mil restos humanos localizados en fosas clandestinas que no han sido identificados.

En el municipio de Tierra Blanca, al sur de la entidad, fue encontrado un “campo de exterminio” con más de cinco mil fragmentos óseos.

Mientras que en el predio La Gallera, municipio de Tihuatlán, en la zona norte del estado, se hablaba de más de diez mil restos sin identificar.

En el fraccionamiento Colinas de Santa Fe, en el puerto de Veracruz, se encontraron 300 cráneos en los cementerios clandestinos.

Los integrantes del mencionado colectivo de familiares de desaparecidos consideraron que hay pocos avances por parte de la Fiscalía General del Estado, en materia de la identificación de cuerpos.

“En La Guapota hay restos humanos de personas que desaparecieron durante los años 2017 y 2018, se han recuperado casi 30 y de esos se han entregado algunos a sus familias, pero es insuficiente la cifra”, enfatiza.

Cabe destacar que, en septiembre pasado, la titular de la FGE, Verónica Hernández Giadáns, reveló que hay cerca de mil 200 cuerpos en los Servicios Médicos Forenses (Semefo) que están sin identificar.

Sin embargo, el pasado 6 octubre, se inauguró la Unidad Integral de Servicios Médicos Forenses de Nogales que agilizaría dichos trabajos.