Cuando el gobernador Javier Duarte tomó protesta a Ramón Ferrari Pardiño, aquel 5 de enero de 2015, el nuevo titular de Sedarpa se comprometió a cumplir con las funciones asignadas, pero no fue así. Las lonas y pancartas en repudio a la gestión del Secretario se convirtieron en la fachada de la dependencia estatal durante días, toda vez que el campo se encuentra en proceso de desaparición y las autoridades, en lugar de evitarlo, contribuyen a ello.
El campo veracruzano enfrenta una crisis histórica que podría ocasionar la devastación, la pérdida desenfrenada de cultivos y el desabasto de alimentos.
Las políticas encaminadas por la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpa), a cargo de Ramón Ferrari Pardiño, han fracasado.
Académicos e investigadores prevén un futuro incierto para Veracruz. La dependencia estatal carece de programas emergentes que puedan hacer frente al problema.
Campesinos y miembros de distintas organizaciones han denunciado que el funcionario prefiere atender las necesidades de su partido, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), durante este 
proceso electoral, que las demandas del campo, situación que debiese ser su prioridad.
Cuando el gobernador Javier Duarte tomó protesta a Ferrari Pardiño, aquel 5 de enero de 2015, el nuevo titular de Sedarpa se comprometió a cumplir con las funciones asignadas, pero no fue así.
La gente, harta de esperar una respuesta positiva, ha viajado más de diez horas para restregarle al subordinado de Duarte sus deficiencias y exigirle trasparencia en el manejo de los recursos públicos.
Para ello, las oficinas, ubicadas sobre la calle Salvador Díaz Mirón, han sido tomadas hasta tres veces por semana.
Las lonas y pancartas en repudio a la gestión del Secretario se convirtieron en la fachada de la dependencia estatal durante días, toda vez que el campo se encuentra en proceso de desaparición y las autoridades, en lugar de evitarlo, contribuyen a ello.
SE AGRAVA CRISIS AGRARIA
Para el integrante del Centro de Investigación Atmosférica y Ecológica (CIAE), José Manuel Castillo Reyes, la Sedarpa debe ser una de las dependencias con un mayor presupuesto a ejercer año tras año.
“Es necesario mayor apoyo a la agricultura, vengo de un ejido y por lo tanto conozco la problemática, es necesario que las dependencias de gobierno apliquen más apoyo económico”.
Los productores de caña de azúcar, maíz y café han sido los más afectados durante este actual gobierno, que encabeza Javier Duarte de Ochoa.
El campo ha sido olvidado. Las autoridades han ejecutado programas, pero han sido “insuficientes” para atender las demandas de los campesinos.
“Yo creo que se necesita mayor implementación de tecnología y programas, para que de esa manera los campesinos no estén desprotegidos, para que ellos puedan trabajar y puedan ser eficientes en su producción. En cuestión agrícola estamos investigando”.
Los académicos sugieren brindar asesoría a los titulares de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca, de manera periódica, en busca de una mejor gestión y resultados favorables.
“Lo que nosotros queremos es desarrollar una tecnología en la agricultura, para que podamos ser más eficientes en el uso de fertilizantes y eficientes en el uso de la producción, son algunas de las cuestiones científicas que estamos trabajando. Vamos a tener resultados, estamos trabajando en ello, el próximo año los tendremos para aportar y dar asesoría a alguna secretaría de nuestro gobierno”.
ESCASEAN ALIMENTOS
La falta de apoyos y programas gubernamentales, y los cambios climatológicos están ocasionando pérdidas en el campo veracruzano y una crisis alimentaria.
De acuerdo con el investigador y director del CIAE, Omar Pensado Díaz, si desaparece la agricultura en Veracruz podría registrarse una situación difícil para la subsistencia del estado.
“Se corre un riesgo de desabasto de alimentos, sí se debe prever esa situación y yo considero que debe ser motivo de seguridad nacional. La civilización debe basarse en el abasto de alimentos, el hambre hace que cambiemos nuestra manera de pensar. El Estado debe garantizar que la población tenga alimento”.
El gobierno es el encargado de administrar, organizar y garantizar el abasto de alimentos a la población; sin embargo, durante el último año se ha desatado una ola de manifestaciones de campesinos en las oficinas de Sedarpa, ante las carencias en sus cultivos.
En ocasiones, arribaban dos o tres manifestaciones al día, para exigir recursos que permitan la aplicación de proyectos productivos.
“Se tienen que implementar programas más eficientes para el campo, el campo no lo podemos descuidar. Yo creo que tenemos que buscar resultados, qué resultados hay y podemos sacar el nivel de eficiencia de la actividad agrícola en el estado, respecto a los apoyos gubernamentales”.
Los estados del norte mexicano poseen programas de invernaderos que garantizan la producción agrícola, situación que en Veracruz no ocurre, toda vez que las políticas públicas en la materia presentan un atraso importante.
“Aquí en Veracruz necesitamos una transformación agrícola, porque es un estado muy generoso, que tiene todos los climas, desde el polar hasta el tropical, y podemos producir muchas cosas, la parte de la ganadería, las asociaciones, ya tienen su tradición, la parte agrícola está más descuidada”, propone Pensado Díaz.
También urge la aplicación de programas de capacitación para los productores veracruzanos, con el objetivo de que adquieran los conocimientos necesarios para asumir los retos actuales que enfrenta el campo.
AUMENTAN RECLAMOS
Pero los campesinos, al no observar la voluntad y el compromiso por parte de Ferrari Pardiño, exhibieron anomalías del funcionario y amagaron con denunciarlo por el delito de desvío de recursos económicos.
De acuerdo con el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Sistema Producto Limón Persa, César Cortés Bello, los funcionarios de Sedarpa prefieren apoyar las campañas electorales de su partido político que apostarle a programas para el rescate del campo veracruzano.
«Las campañas baratas para el campo existen por todos lados, más sin embargo, campañas para candidatos, lo que sobra es dinero; en playeras, en cachuchas y eso debemos evitarlo. Hoy se debe de apostar al campo».
Actualmente, el producto está siendo importado, lo que afecta y saquea de manera directa los bolsillos de los campesinos; sin embargo, los funcionarios prefieren entregar dádivas para conseguirle votos al PRI.
«Todo lo compramos importado y de ahí, se regresan con la alza del dólar. Hoy, una tonelada de fertilizante para el productor de limón anda en 9 mil pesos la tonelada, cuando hace siete años costaba 3 mil 500 o 2 mil pesos la tonelada. A los mexicanos nos iría bien si consumiéramos lo que producimos».
Cabe recordar que el pasado 22 de marzo, campesinos provenientes de Tepetzintla, Cerro Azul y Chicontepec, municipios localizados en la zona norte de Veracruz, acusaron al titular de Sedarpa, de haber cometido un presunto “fraude”, por lo que amagaron con interponer una denuncia penal ante el Ministerio Público federal.
La presidenta de la Fundación Manos a la Obra, Elsa Susana García Suárez, denunció que Ferrari Pardiño había «chamaqueado» a 85 integrantes de la organización, toda vez que los obligó a firmar de recibido y no entregó los recursos económicos correspondientes al mismo número de proyectos de infraestructura.
“Dijeron que era conveniente firmar en ese momento y tomar la fotografía, porque en ese momento les iban a hacer el depósito de su dinero, pero los chamaquearon”.
“El dinero fue depositado por el gobierno federal. Ferrari dijo en su comparecencia que el gobierno federal no le ha dado el dinero. Sagarpade la Ciudad de México ya está enterada de la situación, nos recomienda que el señor (Ferrari) nos entregue la copia de nuestros convenios, para que le den seguimiento”, contó.
Ocho días después, la dependencia estatal volvía a amanecer tomada. Más de 300 organizaciones campesinas de la zona norte de Veracruz habían conformado un frente social para también proceder legalmente en contra del funcionario.
Pues argumentaron haber sido defraudados por el personal de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca.
Los Integrantes de la Coordinadora de Obreros y Campesinos de los Estados Unidos Mexicanos (Cosem), provenientes de Chicontepec, Benito Juárez, Ixhuatlán de Madero y Tantoyuca, participaron en la protesta.
NI A SU PERSONAL PAGA
Hace un mes, personal de la Sedarpa paró labores durante unas diez horas, en reclamo del pago de sus salarios correspondiente a la segunda quincena de marzo.
La jefa de la Unidad de Protección Civil de Sedarpa, Graciela Aguilar Sánchez, señaló que más de 700 empleados de la dependencia estaban siendo afectados económicamente.
Mientras los trabajadores sindicalizados, de confianza, compensación y proyectos protestaban, el titular de la misma se presentaba en el lugar, para dialogar con ellos y llegar a un posible acuerdo.
«Hay gente que tiene más de cuatro o seis meses sin haber cobrado por proyecto pero lo que respecta de base, sindicalizados, a partir de ésta fecha no se ha reflejado el pago nominal, entonces por eso nos estamos manifestando. Dicen que Finanzas no ha depositado cuando sabemos que ya lo hicieron, por eso estamos queriendo que nos digan porqué no han depositado», agregó la representante de los trabajadores.
Un mes antes, unos cinco trabajadores del Departamento de Movilización Animal de la Sedarpa, se ataron a la reja perimetral de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) para exigir los salarios caídos y el finiquito que se adeudaban desde 2014.
Allí, los inconformes amagaron con inmolarse si Ferrari Pardiño o el titular de Sefiplan, Antonio Gómez Pelegrín, no otorgaban una respuesta favorable.
Las condiciones del campo empeoraron durante el último año y, pese a los reclamos e inconformidades, Duarte insiste en mantener a Ferrari Pardiño dentro de su gabinete, con mayor razón en este proceso electoral, mismo que permitiría la renovación del la gubernatura de Veracruz y del Congreso local.