Si el cacique magisterial de larga vida luego del tuit de Rosa Borunda, Juan Nicolás Callejas Arroyo, ha impuesto a su hijito, el Callejitas, en el primer lugar de la lista priista para diputado local pluri.
Y si Gerardo Buganza Salmerón se impuso a Gabriel Deantes y abrió el camino para que su discípulo y aliado, Tomás López Landeros, ex panista y ex diputado local y federal, se perfile como el virtual candidato a la curul por el distrito de Zongolica.
Y si el gurú de Coatzacoalcos, Marcelo Montiel Montiel (dos mil millones de pesos calculan su fortuna personal, sin contar el rancho en Curitiba, Brasil) impuso a su cuaderno de triple raya, Víctor Rodríguez, como inminente candidato a diputado local.
Y si la reina de las barbies, Corintia Cruz Oregón, está ultra contra súper amarrada como candidata a diputada local por el distrito de Xalapa rural.
Entonces, nada malo hay que Jorge Reyes Vera, sobrino del arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, se haya registrado como precandidato a un escaño a la 64ª. Legislatura por el distrito de Camerino Z. Mendoza.
Además, nada de malo hay que Hipólito sea arzobispo camino algún día a Cardenal, y su hermano tenga un holding universitario con unos 23 campus, y el sobrino busque la curul.
Ahora bien, digamos, y solo con una pizca de malicia, que la grey priista evidencia a Reyes Larios porque el arzobispo habría traficado influencias y relaciones para tal posibilidad, lo mismito también aplicaron Callejas Arroyo, Buganza y Marcelo Montiel.
Pero más aún:
Que nadie olvide que el arzobispo levantó la mano a Érick Lagos Hernández en el Congreso local como un acarreado más en su comparecencia y de paso vaticinó que sería un excelente diputado federal, es decir, al mejor estilo de la cultura tricolor lo destapó.
Y por tanto, favor con favor se paga, además de tantos favores recibidos en el camino sexenal de Javier Duarte y también de Fidel Herrera.
Ahora bien, si el Papa Francisco ha pedido a los curitas del mundo marquen la raya con las elites políticas, Reyes Larios pertenece a otra corriente de la iglesia, digamos, a la tribu del cardenal Norberto Rivera y Onésimo Campos.
Además, si es cierto el descubrimiento sicológico del historiador Héctor Aguilar Camín de que en cada mexicano hay un priista enano, entonces, la profecía bíblica se cumpliría al pie de la letra en el arzobispo.
ARZOBISPO SE REGODEA CON EL PODER
Reyes Larios es un arzobispo habituado a regodearse con los políticos.
Por ejemplo, impuso a Fernando Perera Escamilla como presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en premio a su defensa jurídica en Veracruz del sacerdote pornográfico, conocido como “El lobo siberiano”, declarado prófugo de la justicia por Miguel Ángel Mancera cuando era procurador de Justicia en la Ciudad de México.
También el arzobispo ha logrado aumentar el número de RVOE para las facultades y campus propiedad de su hermano, conocidas como la Universidad del Golfo.
Desde luego, cabildeó y cabildeó bien con Javier Duarte la ley anti-aborto, no obstante el legítimo reclamo de las mujeres de disponer de su cuerpo.
Peor tantito: Reyes Larios ha dado la espalda a los graves problemas de inseguridad y de impunidad de norte a sur y de este a oeste de Veracruz.
Nunca una palabra por los feminicidios. Jamás ha abanderado la causa de las mujeres secuestradas, desaparecidas y asesinadas.
Tantito peor: el menosprecio del arzobispo a los indocumentados de América Central (Guatemala, Honduras, Salvador y Nicaragua) en su paso por el territorio jarocho considerado “el cementerio de migrantes más largo y extenso del país”.
Y, por añadidura, el tiempo del desprecio de Reyes Larios al sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, director fundador del albergue “Los hermanos en el camino” y que sin embargo, continúa en pie de guerra, honrando su segundo apellido.
EL INFIERNO Y EL CIELO ESTÁN EN LA TIERRA
La iglesia de Reyes Larios está al servicio de los políticos sexenales de Veracruz.
Y, por eso mismo, nada extraño, raro, insólito, inverosímil sería que su sobrino Jorge Reyes Vera tenga amarrada la candidatura a diputado local gracias a sus mercedes… que Dios le pagará en el otro mundo, y si es posible, le será recompensado aquí con el cardenalato.
Más, mucho más se gana regodeándose con los políticos que con los pobres y los jodidos, los desempleados y los migrantes y los candidatos de oposición a un cargo de elección popular.
Además, la familia es un ente sagrado tanto en la iglesia como en la política y antes de que el arzobispo sea candil de la calle, más indulgencias se ganan alumbrando la casa.
Y si alguien pensara que el arzobispo pagará sus culpas en el infierno, bastaría recordar la frase bíblica de una de las madres de los 5 jóvenes de Playa Vicente levantados por elementos policiacos en Tierra Blanca y entregados al Cartel Jalisco Nueva Generación según afirmara Javier Duarte:
“Dicen que Tierra Blanca es la novia del sol. ¡Pendejadas! Es el infierno”.
El infierno, pues, está aquí en la tierra, igual que el cielo, y más vale estar con la familia aquí en la tierra que en el más allá, que es igualito “a nada” y la nada es nada.