POR JOSÉ ANTONIO UTRERA
Desde hace ocho meses la familia Hernández Sánchez vive un “calvario”. Con el arribo de Roberto Pérez Moreno a la presidencia municipal de Coatepec, su fuente de trabajo se “tambalea”. La Dirección de Comercio y la Iglesia católica le impide la venta de “tacos de canasta” en varios puntos del “Pueblo Mágico”.
A las pocas semanas de rendir protesta Roberto Pérez Moreno como alcalde, fueron desalojados de los bajos del Palacio Municipal de Coatepec donde tradicionalmente se apostaban desde hace casi una década a un costado de la Oficina del Registro Civil que dirige Luis Fernando Polanco Contreras.
Ante ello, la familia Hernández Sánchez –integrada por el joven Reyes Alí y su madre Bertha- optó por instalarse de lunes a viernes en el parque Miguel Hidalgo con horario de 9:00 a 12:00 horas, sin embargo también fueron retirados del lugar por inspectores de la Dirección Municipal de Comercio que encabeza Víctor Hernández Rivera.
Por invitación del párroco de la Iglesia de Fátima colocaron su “canasta de tacos” en el atrio de este recinto católico que se localiza en la céntrica calle de Arteaga pero a los pocos días tuvieron que retirarse porque el patronato del templo –azuzados por el sacerdote Quintín López Cessa de la parroquia San Jerónimo- estimaron inconveniente su presencia.
Desesperados por la intransigencia de las autoridades municipales, los integrantes de la familia Hernández Sánchez consideran la posibilidad de recurrir a la Comisión Estatal de Derechos Humanos o en su caso al Instituto de la Mujer para que, en el caso de la señora Bertha, la respalden como madre soltera y viuda y pueda conservar su fuente de trabajo.