El petróleo arenoso ya puede fluir a raudales: arranca el gran oleoducto Trans Mountain de Canadá

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Después de 12 años, 34.000 millones de dólares en inversión y alrededor de 15.000 trabajadores, el oleoducto Trans Mountain ha comenzado a funcionar en Canadá. Este oleoducto es vital para la economía de Canadá y, sobre todo, para su industria petrolera. Canadá, pese a tener unas de las mayores reservas de petróleo del mundo, se ha enfrentado históricamente a dos problemas u obstáculos: uno es la dificultad para transportar crudo desde sus zonas productoras (que no tienen salida al mar) hasta las regiones que consumen más crudo en el mundo, lo que limita, en buena parte, su producción. El otro, la baja calidad de su crudo, extraído en su mayor parte de lo que se conocen como arenas bituminosas. De estas arenas se extrae un crudo pesado y extremadamente viscoso que se tiene que vender en el mercado con importantes descuentos. Ahora, con la apertura del Trans Mountain, los productores de crudo en las arenas bituminosas tendrán un obstáculo menos.

Canadá produce alrededor de 4,5 millones de barriles de crudo por día, situándose de forma habitual entre los cinco mayores productores de petróleo del mundo. Ahora, las empresas que extraen el petróleo de las arenas podrían aprovecharla apertura del Trans Mountain para incrementar su producción y vender más petróleo EEUU: «El oleoducto tiene el potencial de aumentar significativamente las exportaciones de petróleo, pero es poco probable que el impulso total se pueda percibir hasta dentro de algún tiempo», explican desde Capital Economics.

El proyecto incrementa la capacidad del oleoducto desde los 300.000 barriles por día (bpd) a 890.000. Como Canadá ha exportado recientemente cerca de 4 millones de bpd, la expansión tiene el potencial de impulsar las exportaciones de petróleo en un 15%. Eso aumentaría las exportaciones totales en un 2,5%, equivalente al 0,7% del PIB, según los cálculos de Capital Economics.

No obstante, su potencial no se verá hasta dentro de unos meses. Los analistas explican que los obstáculos logísticos en los puertos (con la ampliación se espera se multiplique por siete el número de petroleros que viajan por las aguas alrededor de Vancouver y Victoria) retrasen su puesta en marcha total. «Esto significa que el oleoducto sólo podrá operar a la mitad de su capacidad. Además, el coste de envío será elevado debido a los enormes sobrecostos del proyecto. Según se informa, las tarifas del oleoducto por sí solas serán de 11 dólares por barril, lo que ya representa el doble de la tarifa del envío a través del oleoducto directamente al centro de Cushing en EEUU», explican desde Capital Economics.

 

 

 

 

«Todo esto hace que sea difícil determinar el probable impacto sobre el PIB. En nuestras previsiones asumíamos que el proyecto entraría en funcionamiento a finales de este mes y aumentaría lentamente hasta alcanzar su capacidad total en 12 meses. Sin embargo, el oleoducto ha comenzado a funcionar un poco antes y podría aumentar su capacidad hasta un 50% más rápido de lo que asumimos. En resumen, el inicio de las operaciones esta semana significa que existen algunos riesgos al alza en nuestro pronóstico de que el PIB del segundo trimestre se mantendrá sin cambios».

 

El petróleo: de la arena al mar

De este modo, el petróleo arenoso (se extrae de las denominadas arenas petrolíferas o bituminosas) fluirá desde la región de Alberta (en el centro del país) hasta los puertos de la costa oeste. Canadá tiene las mayores reservas de arenas petrolíferas del mundo, lo que hace que la industria de este país sea un tanto especial.

Se calcula que de ese tipo de ‘crudo arenoso’ se podrían extraer entre 160.000 y 170.000 millones de barriles de petróleo, por lo que, de contabilizarse, Canadá pasaría a ser el tercer o cuarto país del mundo con mayores reservas probadas de petróleo, rozando los talones a los todopoderosos Irán y Arabia Saudí.

El petróleo que brota de la arena
Las arenas bituminosas son una parte importante de la producción petrolera de Canadá. En 2023, alrededor del 77% de toda la producción del país provino de las arenas bituminosas, lo que representa unos 3,79 millones de barriles al día. El restante 23% de la producción canadiense, aproximadamente 1,12 millones de barriles diarios, fue de un crudo más liviano extraído de yacimientos convencionales, que tienen unas reservas probadas estimadas en unos 4.300 millones de barriles (la OPEP eleva sus estimaciones de reservas de petróleo convencional a 4.700 millones de barriles), explica Jorge Navarro, vicepresidente de AGGEP (Asociación de Geólogos y Geofísicos Españoles del Petróleo), en declaraciones a elEconomista.es.

Teniendo en cuenta este tipo de petróleo, Canadá es una auténtica potencia: «Con unas reservas probadas estimadas en aproximadamente 160.000 millones de barriles, las arenas bituminosas de Canadá destacan como una de las mayores acumulaciones de petróleo del mundo, situando al país en el tercer lugar, detrás de Venezuela y Arabia Saudí en términos de reservas probadas de petróleo», asegura Navarro.

TOMADO DE EL ECONOMISTA.ES