Xalapeños piden paz a Duarte y Bermúdez

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Marcharon vestidos de blanco pidiendo que acabe la violencia en la ciudad

 

POR ROSA VÁZQUEZ

 

Víctimas de asalto, de robo a sus hogares, con pancartas y camisetas de los desaparecidos, con gritos de hartazgo y cansancio, de repetir el mismo discurso una y otra vez ¡Duarte, Zurita, Xalapa te grita ya basta! Y el dolor de quién ya conoce el llanto y la desesperación. ¿dónde están nuestros hijos dónde están?.

¡Únete pueblo, únete! La insistencia de ser más, de que se comprenda que a todos les puede tocar, que la delincuencia mata y las autoridades callan. Pero sólo hay indiferencia, xalapeños dando la espalda al reclamo y prestando más atención al grupo juvenil que entona canciones de pop en una tarima montada por el mismo gobierno del estado.

«Ni un secuestro más, Xalapa quiere paz», «hoy por nosotros, mañana por ustedes» y al otro lado un par de adolescentes opinando: «ya que se callen», quizá aún no cargan la foto de su hermano o primo, quizá después pase al otro lado, con el nudo en la garganta y la petición de tener más refuerzos, de que todo Xalapa luche y proteste.

La iniciativa fue ciudadana, por eso llegaron también estudiantes, profesores ambientalistas, investigadores y hasta políticos con su familia. «Vivos se los llevaron, vivos los queremos».

¡y a bailar! Predomina la voz del conductor del festival patrio, se apagan las voces de las víctimas, las de los preocupados, las que no llegarán a abrazar hoy a sus hijos, los que no pueden tener fiesta patria porque su ciudad se cae a pedazos «no más circo, más seguridad».

Lo increíble es que nadie se suma, que a nadie le importa, que prefieren bailar danzón y cuando la voz se cansa sólo queda permanecer de pie con la esperanza de que alguien más escuche el mensaje y que se una a la lucha sin que la delincuencia llegue hasta su vida.