Un avión de American Airlines con 64 personas a bordo choca con un helicóptero militar en Washington

0
34

El vuelo comercial siniestrado es el 5342 de American Airlines que volaba desde Wichita (Kansas) a la capital de Estados Unidos. A bordo del helicóptero, un Black Hawk, iban tres soldados

Un avión comercial con unos 60 pasajeros y 4 tripulantes se ha estrellado este miércoles en Washington con un helicóptero militar sobre el río Potomac. El aeropuerto Ronald Reagan de Washington (DCA), al que se dirigía el vuelo, ha paralizado las operaciones tras el accidente aéreo. Según la autoridad de aviación (FAA, por sus siglas en inglés), el avión siniestrado estaba operado por PSA Airlines y era un Bombardier CRJ-700 que había partido de Wichita (Kansas) en un vuelo regional, según ha indicado la autoridad aérea (FAA, por sus siglas en inglés). El avión se ha estrellado con un helicóptero Sikorsky H-60 (Black Hawk) que estaba en un vuelo de entrenamiento poco antes de las 21.00, hora local (3.00 en la España peninsular). Se trataba del vuelo 5342 de American Eagle, la compañía de vuelos regionales del grupo American Airlines. El helicóptero llevaba tres militares a bordo.

Los equipos de rescate han recuperado una veintena de cuerpos del agua, pero ninguna persona viva, según los medios locales. No se espera que haya supervivientes, dada la naturaleza del accidente. El helicóptero se ha acercado al avión hasta estrellarse con él. Los aparatos han explotado en el aire, iluminando el cielo de la capital, según se aprecia en un vídeo que circula por las redes sociales, tomado con la webcam del Kennedy Center. Los datos de vuelo de FlightAware muestran que estaba en plena maniobra de aproximación al aeropuerto. Tras el choque, los restos se han hundido en las oscuras y gélidas aguas del Potomac.

American Airlines ha confirmado los datos conocidos del accidente en un comunicado, incluida la cifra de pasajeros y tripulantes. .”Nuestra preocupación se centra en los pasajeros y la tripulación a bordo de la aeronave. Estamos en contacto con las autoridades y colaborando en la respuesta de emergencia”, ha dicho la compañía, que ha abierto líneas de asistencia para familiares.

Robert Isom, consejero delegado de la compañía, ha indicado en un vídeo que la aerolínea está cooperando con las autoridades federales, estatales y locales que investigan el accidente. “Queremos averiguar todo lo que podamos sobre los acontecimientos de hoy”, indica, expresando su dolor a las víctimas y añadiendo que pronto se dirigirá a Washington junto a miembros de su equipo.

“He sido plenamente informado del terrible accidente que acaba de tener lugar en el Aeropuerto Nacional Reagan. Que Dios bendiga sus almas. Gracias por el increíble trabajo que están haciendo nuestros primeros intervinientes”, ha declarado el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un comunicado distribuido por la Casa Blanca.

“Confirmado pequeño avión caído en el río Potomac cerca del Aeropuerto Nacional Reagan. Barcos de bomberos en escena”, había tuiteado el servicio de bomberos antes de conocerse la escala de la tragedia. Hay un fuerte despliegue de vehículos de emergencia junto al río y por el centro de la ciudad sonaron las sirenas de camiones de bomberos y policías que se dirigían a la zona.

“Se han interrumpido todos los despegues y aterrizajes en DCA. El personal de emergencia está respondiendo a un incidente aéreo en el aeródromo. La terminal permanece abierta”, ha tuiteado la cuenta del Aeropuerto Ronald Reagan, que ha cesado las operaciones por este miércoles. El aeropuerto se encuentra ya en el Estado de Virginia, en la orilla del río Potomac. Los vuelos con destino a dicho aeropuerto han sido desviados a los aeropuertos de Dulles (Virginia) y Baltimore (Maryland), que también dan servicio a la capital.

“Esta noche, hemos recibido noticias devastadoras de lo que solo puede describirse como nada menos que una pesadilla. Un avión que viajaba a la capital de la nación desde Wichita, Kansas, con unos 60 pasajeros, colisionó con un helicóptero militar. Mi oración es que Dios envuelva con sus brazos a todas y cada una de las víctimas y que siga estando con sus familias”, ha escrito, por su parte, el senador por Kansas Roger Marshall.