Este viernes trabajadores de la dirección de Limpia Pública municipal mantuvieron bloqueada la vialidad de la calle Enríquez durante algunas horas como protesta a los actos de abuso de poder y humillaciones que sufren por parte de la policía vial.
Desde antes de las 8:00 de la mañana realizaron un paro total de labores exigiendo dignificación para su trabajo, respeto por parte de los elementos de la dirección de tránsito del estado y el regreso de dos unidad decomisadas y algunas licencias para conducir que les fueron retiradas.
Desde poco antes de las 10:00 de la mañana bloquearon la vialidad de la calle Enríquez mientras tocaban la campana de la basura y exigían dejar de ser llamados «mugrosos» y que se valore su labor.
No volverán a las calles a recoger la basura hasta que les entreguen las dos unidades de recolección que les fueron retiradas en días pasados, y el compromiso de dejar de ser humillados por los agentes viales.
Marilú Aguilar, chalan de recolector, acusó que los trabajadores tienen que hacer maravillas para optimizar los recursos con los que cuentan y realizar la recolección en toda la ciudad pues sólo cuentan con 38 unidades para cubrir las rutas en 458 colonias.
[quote]»Los policías viales nos faltan al respeto, nos humillan y no es justo. Nos quitan los vehículos y no se vale. Sí somos mugrosos porque levantamos la basura que todos tiran».[/quote]
Pidió a los elementos de tránsito que sean más comprensivos y amables con ellos, pues realizan una labor muy importante y vital para la ciudad, bajo condiciones difíciles, soportando lluvia y sol para tener limpia la capital veracruzana.
Dijeron que no se retirarían hasta que les entreguen las dos unidades de recolección que tiene en el corralón tránsito del estado y acusaron que el problema es que los elementos viales piden «mordida» para dejarlos continuar pero ellos se niegan a sobornarlos y por eso los tratan de esa forma.
Por su parte Felipe Herrera, inspector de la dirección, acusó que a él personalmente los elementos de la policía vial han intentado pedirle dinero para que lo dejen circular y continuar con su trabajo de aplicación de multas cuando la ciudadanía saca su basura a destiempo.
«Hay mucha corrupción y los elementos en lugar de apoyarnos nos humillan, tratan se sobajarnos y si no fuera por nosotros que somos los menos pagados y todavía de que les limpiamos la ciudad nos hacen esto».