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El primer reportero plagiado
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Detenido hijo de un periodista
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Secuestrada hija de un columnista
EMBARCADERO: En apenas, apenitas, apenititas, ocho días de la Yunicidad, los malosos mostraron el puño… La primera fosa clandestina en Cosoleacaque… El primer secuestro de una mujer en Coatzacoalcos… El primer fuego cruzado entre malandros y policías en Suchilapan, en el municipio de Jesús Carranza, donde naciera Fernando López Arias, el poblado atrapado en medio de tres días de tiroteo con un saldo de 20 muertos, los de días anteriores y el día crucial… El territorio sembrado de cadáveres… Y en la disputa por la plaza, tres sucesos ligados al ejercicio periodístico en Veracruz… El primero, el hijo del reportero Pedro Tamayo, asesinado en Tierra Blanca el primero de julio del año que corre, detenido, acusado del robo de una camioneta y luego enseguida del secuestro de una persona… El segundo, el secuestro, digamos, exprés, de la hija del reportero del Diario del Istmo en Coatzacoalcos, exregidor, duartista y fidelista a morir, Federico Lagunes, quien hasta de Celestino servía… Y el tercero, la madrugada del jueves el secuestro exprés en el puerto jarocho del subdirector editorial del periódico “Imagen”, con sede en Boca del Río, Silverio Quevedo Elox… El profeta del desastre diría que los tres hechos nada tuvieran de vasos comunicantes, pero…, pero al mismo tiempo, el politólogo Carlos Ronzón Verónica lo dice así: “Piensa mal y acertarás”… El viernes 9, un día después del plagio, Quevedo tomó cafecito con el Fiscal Jorge Winckler, y desde luego, se tomaron la foto como estaba programada, donde Winckler aparece sonriente, contento, feliz, se ignora si por tomar café con el reportero y/o por algún recuerdito en su memoria… Y más, por la siguiente razón: antes, mucho antes de que “el gallo cantara tres veces”, Quevedo se anticipó a la investigación judicial de su secuestro y asalto y aseguró para el mundo que su percance ninguna relación, absolutamente ninguna tenía con el periodismo…
ROMPEOLAS: En el año 1993, el reportero Silverio Quevedo publicó en el periódico “Sur”, padre de “Imagen”, un reportaje sobre el origen del nacimiento de Patricio Chirinos Calero sucedido en Tamuín, San Luis Potosí, en vez de Pánuco como cacareaba el boletín… Quevedo obtuvo la copia certificada por el Registro Civil del gobierno potosino del acta de nacimiento de Chirinos… Y fue, en aquel tiempo salinista, un éxito periodístico… Nadie, claro, desearía pensar que su asalto (con madriza de por medio) estaría vinculado al episodio aquel de hace 23 años, aun cuando el relato bíblico habla de que el ser humano ha de sentarse en la banqueta de su casa a mirar pasar el cadáver del enemigo… Pero, bueno, si se lee la carpeta de investigación levantada por el Fiscal Séptimo de la Unidad Integral de Procuración de Justicia, con sede en Veracruz, Héctor Igor Aguilar Aguilar, la piel se enchina… Claro, claro, claro, en el tiempo revuelto y turbulento que se vive y padece, herencia duartiana, mil veces preferible resulta enjaularse en casa sin salir de noche, porque los malandros acechan por todos lados… Silverio Quevedo, por ejemplo, fue asaltado hacia las cero horas por un par de sicarios que lo secuestraron y lo golpearon y lo llevaron a sacar dinero de sus cuentas bancarias y lo encañonaron… Pero, además, le advirtieron que habían sido contratados para matarlo… Simple y llanamente, para matarlo… Y aun cuando, digamos, pudiera tratarse de un recurso terrorista para intimidar, el hecho está consignado en la carpeta de investigación… Con todo, el secuestro expresa el terror en que se vivió durante los seis años de Javier Duarte y que tan sólo en el oficio reporteril significara el asesinato de 19 trabajadores de la información, más tres desaparecidos, quienes plagiados desde el año 2011 significaría (y ojalá estuviéramos equivocados) que ya fueron ejecutados… Y por tanto, en vez de 19 las víctimas la lista llegó a veintidós… Todos, en la impunidad, como quedaron…
ASTILLEROS: Hasta donde se sabe, en el caso de la detención del hijo del reportero Pedro Tamayo, QEPD, la cosita esa llamada Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas, CEAPP, habría intervenido, se ignora el resultado, porque el joven de 27 años, chef de primera, sigue detenido con el alma quebrantada de su señora madre…Ningún pronunciamiento, sin embargo, sobre el plagio de la hija de Federico Lagunes, ni tampoco sobre el secuestro exprés de Silverio Quevedo… Quizá estén demasiado ocupados en la sucesión anunciada de la presidenta, Benita González, conocida como “La dama de los velorios”, porque en su tiempo nublado sólo alcanzaba a vestirse de negro para que acompañada de un fotógrafo fuera al velorio de un reportero a dar el pésame… Luego del asesinato de la corresponsal de Proceso, Regina Martínez (Xalapa, 28 de abril, 2012), don Julio Scherer García y su equipo exigió cuentas a Javier Duarte en el palacio de gobierno y en ningún momento permitió la foto, porque son cosas que han de cabildearse lejos de las candilejas… Quevedo Elox aceptó la gráfica con el Fiscal y tendrá sus razones, que se respetan… Lo importante, sin embargo, es garantizar la seguridad en la vida y en los bienes como lo establece el Estado de Derecho para bien de los 8 millones de habitantes de Veracruz, la entidad federativa más lastimada, herida, vejada y humillada… Al momento, por ejemplo, el Fiscal ha omitido viajar a Coatzacoalcos para entrevistarse con la familia de la chica secuestrada, en tanto se ha vuelto sordo ante la fosa clandestina en Cosoleacaque…