POR ROCÍO RIVERA MÉNDEZ/EL PUERTO
Nostalgia y orgullo se anidan en los ex empleados del Hotel Villa del Mar y de la familia Fernández quienes tomaron la decisión de cerrar el ciclo de este negocio y dar paso a un proyecto de vanguardia; el lugar se convirtió en parte de la historia de Veracruz, donde se gestaron infinidad de anécdotas, sueños, trabajo y dedicación
Con 14 mil metros cuadrados que guardan ocho décadas de historia, de las cuales seis la escribieron la Familia Fernández, el emblemático Hotel Villa del Mar, que con su diseño arquitectónico refleja aún el Veracruz de ayer, está próximo a ser demolido y convertido en una moderna Plaza Comercial, para atender a quienes viven y visitan este municipio de Veracruz.
Tras el cierre de sus puertas el pasado jueves 14 de agosto –de acuerdo al anuncio hecho en su cuenta de Facebook- y el haber finiquitado legalmente la relación laboral con sus 26 sus trabajadores sindicalizados y 48 empleados de confianza, hoy el Hotel Villa del Mar concluye su historia para dar paso a la modernidad.
Para los trabajadores hay preocupación y nostalgia del no saber qué harán mañana pero también el orgullo de haber sido parte en esta historia del Veracruz antiguo.
AÑOS DE TRABAJO Y DEDICACIÓN
Herminio Peña Fernández, de 57 años de edad, 38 de ellos dedicados al trabajo en el Hotel Villa del Mar, siente esa nostalgia que da el interrumpir, de manera inesperada, una rutina que llevó día a día durante 37 años con 10 meses.
Con lluvia, norte, sol, frío, don Herminio llegaba a cumplir con su labor diaria como dependiente de comedor.
“Era una actividad diaria, atender comensales, hacer café, servirle, levantar platos, entre otras cosas que formaron parte de su vida desde los 18 años cuando ingresó como lava-loza.
“Primero empecé como trabajador de lava loza, luego pasé a cocina y al final a mesero”.
¿Por qué le gustó ese trabajo?
“Era grato y remunerable, además, siempre tuve contacto con la gente y aquí me quedé.
Aquí, en este hotel, se hospedaron miles de familias, unas ya partieron, se adelantaron en el ciclo de la vida”, nos dice.
De aquí de Veracruz, ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Querétaro, Guerrero, de tantas y tantas partes de la República y el extranjero, llegaron a disfrutar de estas hermosas instalaciones con vitrales de colores vivos, donde se daba no solo una calidez en hospedaje sino otros servicios como el restaurante, alberca, salones para fiestas y tantas cosas más.
Respecto a sus patrones, comentó “la familia Del Puerto siempre fueron una familia unida, dieron buen ejemplo a muchos trabajadores, incluyéndome, eso influyó en que siguiera ahí tantos años”, dice don Herminio.
El trabajador más antiguo del Hotel Villa del Mar, califica de buenas personas a la familia Del Puerto y Fernández del Puerto: “Nunca oí una mala palabra, siempre mostraron su unidad familiar, su trato respetuoso hacia quienes éramos sus empleados”.
Don Herminio no sabe aún qué hará, pues le faltaban tres años para pensionarse. Su familia, -esposa e hijo- saben de este cambio que hay en sus vidas al cerrarse la fuente de empleo.
El, admite, aún no coordina sus ideas, no está consciente de su nueva vida. Sí, reconoce, fue buena la liquidación. Pero, ¿cómo seguir sin esa rutina de casi 38 años?
DECISION DIFICIL QUE BENEFICIA A VERACRUZ
Adquirido por don José del Puerto Barba a la familia Remes el 4 de enero de 1954, el Hotel Villa del Mar permaneció en esa línea familiar hasta este 14 de agosto de 2014.
Nieto de don José, el ingeniero José Manuel Fernández del Puerto, nos comenta lo difícil que fue para toda la familia tomar una decisión así.
Entrevistado brevemente mientras supervisaba las operaciones de inventario de este hotel, el ingeniero Fernández expresa el orgullo de pertenecer a esta gran familia pero admite, en el cierre del Hotel Villa del Mar les hace sentir una especial nostalgia por lo que hoy concluye.
Pero está consciente y orgulloso de que el emblemático Hotel Villa del Mar ha prestado servicios de calidad y calidez, generando empleos y tradición en esta ciudad y puerto de Veracruz.
“Obviamente es una pena para nosotros tener que tomar una decisión así. Ya después de muchos años, el Hotel Villa del Mar ha prestado sus servicios con calidad, y hemos tratado de darle al cliente el servicio indicado y correcto. Tomamos una decisión gracias a una oportunidad que se presentó dónde nos proponen un crecimiento para la plaza, para la ciudad”.
Pero será una plaza comercial con servicios integrados, cines, tiendas de ropa grandes, muchos servicios, lo más cerca a esto está en Plaza Nueva Veracruz.
Sin ningún conflicto laboral, pues se han pagado las prestaciones de ley, el Hotel Villa del Mar cierra sus puertas de manera definitiva y sus dueños se suman a un proyecto muy importante para Veracruz, que es un moderno centro comercial.
“Afortunadamente tenemos la fortuna de poder unirnos a un grupo muy importante, muy comprometido con el crecimiento de las ciudades de México, para nosotros es sano , saber que estamos en manos de gente buena, que nos va a dar a la ciudad de Veracruz cosas buenas”, señala el entrevistado.
¿Participan como socios?
“Correcto. Nosotros estamos sumándonos a un proyecto muy importante para Veracruz”, puntualiza el ingeniero José Manuel Fernández del Puerto, quien recuerda “desde que tengo uso de razón me veo aquí, y desde que tengo facultades para trabajar, aquí estoy”.