¡Girl visual power! Rebeldes de la lente; fotógrafas enfrentan estereotipos de género

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Una cámara, un lente, una historia que contar, música y mucha pasión es lo que ha llevado a varias mujeres a decidirse a abrazar la fotografía no sólo como su profesión, sino como su estilo de vida en el que pueden expresarse como ellas quieran.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, poco más de 34% de la población que se dedica a la fotografía en México son mujeres, y al parecer cada día se abre más el espacio. El camino no ha sido sencillo y en pleno siglo XXI, las fotoperiodistas y fotógrafas continúan enfrentando estereotipos de género que sin duda las han hecho más duras, aferradas y orgullosas de dedicarse a esto.

 

Frases como “¿y sí sabes cómo se usa una cámara?” o “¿eres novia del cantante?” son sólo algunas de las frases que escuchan todos los días, pero que al final les han dejado grandes aprendizajes.Antes de cubrir conciertos empecé a cubrir espectáculos en general. Iba a presentaciones de obras de teatro, alfombras rojas y de hecho, odio las alfombras rojas por esa razón. Me tocaba escuchar comentarios en el área donde están los fotógrafos, donde hablaban de las mujeres y cuando pasaban a las alfombras y les gritaban ‘vuelta’, ‘a ver, mándanos un besito’ o literal decían ‘¡ay, esa no porque está fea!’. Independientemente del tema profesional, como mujer era muy incómodo. Pero también yo no tenía las herramientas, estaba muy chiquita, tenía 17 o 18 años, no tenía las herramientas para poder pararlos en ese momento.En el tema de conciertos, cuando empiezas, sí sientes la diferencia, hay como cierto desdén en el trato, pero con el paso del tiempo he aprendido a darme mi lugar y a darme a respetar cuando lo he tenido que hacer. Evidentemente, he recibido comentarios machistas, desde que si me tuve que acostar con alguien para estar en donde estoy y que se cuestione mi trabajo por relacionarme con otras personas, pero he optado por, simplemente, trabajar arduo”, compartió Liliana Estrada, fotógrafa del equipo de Ocesa.Como que te ven como groupie porque eres mujer, no puedes estar ahí trabajando nada más. A la fecha, quien no me conoce y me ve ahí, me preguntan si voy con el cantante. ¡No!, soy una fotógrafa del grupo, me dicen mil cosas. Una vez me contrató un mánager, porque vio mi trabajo, y cuando llegué me dijo: ‘me preocupa ver si puedes tomar las fotos porque va a estar muy complicado y muy oscuro’. O sea, me contrató porque vio lo que hago, ¿para qué te dicen esas cosas?”, recordó Toni François, una de las primeras fotógrafas dedicadas a capturar la música en imágenes.

Elizabeth Velázquez, fotoperiodista en Excélsior, expresó que ha tenido mucha suerte de rodearse de personas que, al contrario, la han apoyado y arropado y que no ha tenido nada que ver con el género.Yo no he tenido problemas con el hecho de ser mujer y fotógrafa. Y que sí es cierto, sí es un mundo que aún sigue habiendo mayoría de hombres, pero no, yo no he tenido esa complejidad, al contrario, creo que me han ayudado. En los conciertos de repente me he apoyado en algunos de los compañeros y en su experiencia que ya han hecho esos artistas y que ellos son los que te dicen ‘aguas, porque puede haber estrobos’. He tenido buenos

compañeros.He tenido también la suerte de que los jefes confíen en mandarme a ciertas coberturas, porque si desde ahí no partes, si tu jefe no confía en ti, está complicado y es donde yo he visto que muchas mujeres tienen esa problemática de que mandan a los compañeros a ciertas fuentes”, explicó Velázquez.

Tomar una fotografía no sólo es tratar de que no se vea borrosa en el lente y apretar un botón, va mucho más allá de eso. Es dedicación, práctica —mucha—, estudios —ya sean académicos o de campo— y tener lo suficiente para, aunque se sea minoría, ser parte de un gremio.Hay muchas fuentes, la policiaca o la de toros, por ejemplo, donde creo tenían como argumento que dábamos mala suerte si había una mujer en el ruedo. Y te preguntas ‘¿por qué no?’ Hay cuestiones que son tabúes y pues no. Desde el principio era porque tienes que cargar con mucho equipo. Lo análogo o cargar con el laboratorio como antes existía, y el argumento era que ‘no aguantan todo el equipo’. Desarrollar el trabajo es cuestión visual y de formación académica, que podemos estar a la par hombre y mujer, porque pues el espacio del periodismo no tiene que ser cuestión de género.Retomando la pregunta, sí existen todavía esos espacios, a veces le llaman, a dar la bienvenida. ‘Ah, déjala que sufra’ o ‘ahí déjala, a ver cómo sale’. Pero también hay compañeros que te encuentras en el camino que han sido más empáticos, que te ayudan y eso también ayuda. Ya se han abierto más espacios para las fotógrafas y camarógrafas, que también empiezan a parecer porque difícilmente podíamos ver camarógrafas. Qué bueno que se está, más que nada, rompiendo el estigma de que solamente hombres podían realizar esta labor”, explicó Karina Tejada, fotoperiodista de Excélsior.

Detrás del trabajo de estas mujeres hay una cantidad de retos y obstáculos a los cuales se han rebelado y, por tanto, la fotografía las ha llevado a encontrar una satisfacción pura de saber que son profesionales comprometidas con su oficio.Mas que el género, el mayor reto ha sido mantenerse y vivir realmente de la fotografía de conciertos. Es un campo competitivo y demandante, donde hay que luchar mucho para que realmente vivas de ello y donde la constancia y perseverancia son clave.

Como mujer he visto que cada vez hay más espacios para futuras generaciones, pero el verdadero desafío es hacer de esta pasión una profesión sostenible a largo plazo. No podría elegir una sola imagen, porque todas forman parte de mi historia como fotógrafa. Lo que realmente me llena es el proceso: estar en el momento, sentir la música y capturar esa energía que se genera entre el artista y su público”, dijo Lourdes Urdapilleta, fotógrafa de Ocesa.

Y en esa satisfacción también existe el reconocimiento, sí, de sus colegas, pero también de aquellos a quienes han inmortalizado en sus capturas.Las fotografías de lucha libre es un proyecto personal que tengo trabajando desde hace muchos años. Pero si tú ves mis redes sociales, inclusive piensan que sólo cubro espectáculos, aunque casi no voy, pero son las que más disfruto. Una de las que más me gustan son unos retratos que le acabo de hacer a Marina de Tavira y de conciertos una de Café Tacvba donde salen en el carro volando”, compartió Elizabeth Velázquez, quien acaba de participar en la muestra Fotógrafas de la vida cotidiana, en el Museo de la Ciudad de México y La mujer detrás de la cámara: Fotoperiodismo de ayer y hoy, que se abrirá el 12 de marzo en el Museo Archivo de la Fotografía.

Uno de los reconocimientos que más orgullosa tiene a Toni François fue cuando en septiembre de 2023 trabajó como fotógrafa para Depeche Mode durante sus presentaciones en el entonces Foro Sol.Fue un logro para mí trabajar para un grupo de ese tamaño. Se portaron muy bien conmigo y digamos que reconocieron mi trabajo. Fue muy importante ese momento”, dijo.

En marzo de 2022 Foo Figthers visitó México ofreciendo un concierto memorable no sólo por la calidad del show, sino porque fue el último que la banda dio con su baterista original Taylor Hawkins, quien días después falleció en Colombia.

Existe una imagen que dio la vuelta al mundo de ese show, e incluso fue proyectada en el homenaje que le realizaron a Hawkins en Londres… la tomó una mexicana.

Las condiciones y el contexto de esa foto son muy tristes porque fue a raíz de la muerte de Taylor Hawkins. El ver a todos los lugares donde llegó, fue la que proyectaron en Wembley en el homenaje, salió en medios de la India, de Israel, en Europa, en Sudamérica, en un montón de lados. Le dio la vuelta al mundo.

Y me mostró que lo que yo hago no es solamente capturar imágenes, sino es documentar un momento importante y que quizá ese tiro que haces puede representar algo importante para la banda, para los fans, para uno mismo. Que esta foto llegara hizo a un lado mi síndrome del impostor y me ayudó a creerme lo que estoy haciendo y que lo estoy haciendo bien”, señaló
Estrada.

Y si en algo coinciden estas cinco fotógrafas mexicanas es en que las niñas pueden ser lo que ellas quieran siempre y cuando tengan la disciplina, dedicación, preparación, compromiso y sobre todo las agallas para levantar la voz y aferrarse a su elección cuando les digan que, por ser chicas, no pueden.

*EXCELSIOR