- Súper gabinetazo
- Ni Fox lo tuvo
- Góber se pavonea
I
El sábado 20 en la Casa Veracruz hubo comelitona navideña del gobernador con el gabinete legal y ampliado.
Según Javier Duarte, en los últimos 4 años ha descubierto en su gabinete secretarial y subsecretarial los siguientes atributos (favor de leerse tomando respiración, como si el lector fuera buzo):
Capaz, talentoso, con experiencia, exitoso, gran equipo y triunfador.
Pero, además, innovador, creador, renovador, visionario y sensible.
Más todavía: cumplidor de metas, con rumbo, con destino y hacia adelante, todos, “como es nuestro lema oficial”.
Y, bueno, se trata, pues, de un súper gabinetazo, mejor, por ejemplo, que el gabinete de Vicente Fox Quesada, al que él mismo llamaba, en efecto, “mi gabinetazo”.
Ya quisiera, por tanto, el presidente Enrique Peña Nieto tener un gabinete con tantas cualidades que ni siquiera, vaya, los emperadores romanos, fundadores del Estado, pues, y por ejemplo, entre ellos se traicionaban y asesinaban, tentados por el poder político, que también es social y económico.
¡Hosanna, hosanna!
Desde luego, queda claro: el góber padrísimo es un privilegiado con un gabinete de tal magnitud.
Y, bueno, si antes se percibía que, por ejemplo, Fernando López Arias habría tenido el mejor gabinete en la historia de todos los tiempos en Veracruz, el mejor, el mejor, el mejor es el equipo duartista.
II
Felices, pues, satisfechos, contentos, los 8 millones de habitantes de Veracruz.
De acuerdo con el historiador Daniel Cosío Villegas, el mejor gabinete federal ha sido el de Benito Juárez (Francisco Zarco, Sebastián Lerdo de Tejada, Melchor Ocampo, Guillermo Prieto, Ignacio Ramírez, Ignacio Manuel Altamirano, etcétera), pues “aquellos hombres parecían gigantes”.
Entonces, releyendo las cualidades resumidas por Duarte sobre su gabinete, sus hombres, más que gigantes, parecen, digamos, Batman, Superman, La Chica Maravilla, personajes súper dotados de la leyenda.
Por ejemplo, Érick Lagos ¿capaz, talentoso, experto, exitoso, triunfador, innovador, creador, renovador, visionario, sensible, cumplidor de metas, y con una gran conciencia social para trabajar en equipo?
Ni siquiera, vaya, la astróloga de los Llanos de Sotavento, doña Elpidia Canelo, que fue su gurú de cabecera en Isla, habría mirado en la bolita de cristal el desarrollo de tantas facultades de aquel niño chaparrito, bajito de estatura, flacucho, que todo tiraba a desmadre, a quien su primo Silvio Lagos Galindo llamaba “El niño pobre de la familia”.
III
Es más, como mero ejercicio navideño, si así le pareciera, repase el lector las virtudes enumeradas por el góber sobre su gabinete y póngale nombre en cada caso y responda en silencio, como si jugara póker para definir el perfil de cada uno tal cual.
Lástima, sin embargo, que los 15 atributos citados líneas anteriores pasen inadvertidos para la población de Veracruz, la mayoría pobre y jodida, desempleada, subempleada con salarios de hambre y migrantes, harapientos les llamaría John Reed, desheredados de la fortuna Albert Camus, los miserables Víctor Hugo.
IV
Mateo 25:14-30 y Lucas 19:11-27 dicen que el talento deriva de la inteligencia y la aptitud.
Y las aptitudes están ligadas a las destrezas personales para sobresalir en una tarea.
Así pues, y en base al postulado bíblico, Érick Lagos posee una destreza insólita para aplicar en Veracruz el principio marxista/leninista: “En política todo lo que se compra con billete… sale barato”.
Es más, el mejor discípulo de la Universidad de Harvard, campus Nopaltepec, es Laguititos, quien desde el fidelato (sexenio aciago caracterizado por la corrupción) tal cual se ha abierto paso.
Según la fama pública, nunca un político ha corrompido a tantos… en tan poco tiempo.
Por eso, quizá, su primazo, Silvio Lagos Galindo, alto funcionario de la SEDATU, ha dicho que para la mini gubernatura cualquier otro duartista, “menos Érick Lagos”, quien, por cierto, es tan exitoso (otra cualidad duartista) que ha seducido a un montón de delegados federales.
V
Veracruz ha sido redimido por el gabinetazo.
Ojalá y la elite política que ahora gobierna desde Los Pinos pudiera mirar a Veracruz, porque la joven generación en el poder está llamada a volar en el altiplano.
El localismo empobrecedor les ha quedado chiquito.
Por eso, quizá, mejor dicho, sin ninguna duda, el contralor Ricky García Guzmán rafaguea a los medios diciendo que cada vez que cuestionen a un duartista lo linchan en la vía pública; pero sobre todo, “lastiman a Veracruz”, confundiendo a cada secretario del gabinete legal con la patria misma.