POR NOÉ ZAVALETA
El 25 de agosto inicia de manera oficial la ampliación del puerto de Veracruz, mega obra que habrá de prolongarse hasta el 2030, sin embargo, la polémica inicial se centra ahora en la construcción de un rompe olas con roca basáltica extraída de bancos naturales
La construcción del rompe olas, primera fase de la ampliación del puerto de Veracruz, arrancará el próximo 25 de agosto, teniendo como responsables a las empresas Tradeco y Caltia Construcciones, quienes ganaron la licitación, informó la Administración Portuaria Integral de Veracruz (APIVER).
Dicho rompeolas, que tendrá que abarcar los 30 nuevos puntos de atraque del recinto portuario, tendrá una construcción –estimada- de 17 meses, pues a decir del director de APIVER, Ignacio Fernández Carvajal se pretende concluir en enero del 2017.
Esta valla de contención servirá para evitar estragos cuando haya fenómenos meteorológicos y de los propios embates del mar, posteriormente vendrá la colocación de la tabla estaca, el dragado y la construcción de las primeras posiciones de atraque, según datos de APIVER.
El gobierno de Peña Nieto y el de Duarte ya presumieron que en dicho proyecto transexenal –programado a concluirse en 13 años- se invertirán 60 mil millones de pesos para la ampliación del Puerto de Veracruz, con lo cual –festinaron autoridades- se podrán generar 140 mil empleos (de estos, 100 mil son indirectos) y de paso detonar a esta región del Golfo de México, como la más importante del sureste mexicano, ello, aunque se sacrifiquen diversos espacios catalogados como Áreas Naturales Protegida (ANP).
Pese a que investigadores y ambientalistas advirtieron que el megaproyecto arrasará con especies únicas que habitan en esta zona costera (damisela, payasito, tijerilla, cirujano, perro cubano y lorita, así como la tortuga verde), las autoridades federales, estatales y portuarias pasaron por alto este llamado.
APIVER antepone la inversión y la magna obra al medio ambiente, pues precisa que del 2014 al 2018 –cuando concluya el sexenio de Peña Nieto- la primera etapa de ampliación tendrá ya su rompeolas, dragado y construcción de terminal de contenedores con una inversión cercana a los 30 mil millones de pesos.
Mientras que del 2019 al 2030 se invertirán 70 mil millones de pesos para construir los 30 nuevos puntos de atraque, en donde la inversión será –aproximadamente- 39 por ciento del gobierno Federal y Estatal y 61 por ciento de la iniciativa privada.