Veracruz, Ver.- La familia de Emily, quien debía tener una noche de ensueño celebrando sus 15 años, vivió una pesadilla en el salón Brasa del puerto de Veracruz; después de que los dueños, tras haber recibido 50 mil pesos por el servicio, entregaran un inmueble sin luz, sin agua y con baños sucios.
A través de redes sociales, la familia de la joven reclamó que, justo cuando Emily estaba realizando su vals, la energía eléctrica dejó de funcionar, así como la música, por lo cual tuvieron que terminar su baile a oscuras y con los aplausos de los invitados.
Momentos más tarde, la energía eléctrica regresó pero de manera parcial, el dueño dijo a los invitados que podrían utilizar el salón de arriba, mismo que se utiliza para fiestas infantiles, y donde justamente estaba por terminar una.
No obstante, en el nuevo salón la situación fue la misma: sin luz, sin agua potable y con baños sucios. La comida se sirvió cerca de las 10 de la noche, cuando la fiesta estaba programada para arrancar dos horas antes.
La familia de Emily denunció la falta de respeto y de profesionalismo por parte de los dueños del salón social Brasa.
Tras denunciar los hechos, en redes sociales se enteraron de que más clientes han sido víctimas del mal servicio en el inmueble, ubicado en la intersección de la avenida Xalapa y la calle Victoria, donde al parecer ya es una constante que no haya agua y que se vaya la luz.