Porros legislativos
Casi siempre hay un frijol negro en el arroz. Y es que en la comparecencia del titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla, en lugar de resaltar la información en este tema, destacó el altercado de la reportera Concepción Sánchez, más conocida como Conchita, quien fue agredida por un presunto porro al servicio de la dependencia estatal.
Después del zafarrancho en la sala durante el ejercicio de rendición de cuentas, donde algunos diputados cuestionaban al capitán Zúñiga, pero unos hombres del público gritaban “corruptos y rateros” a los representantes populares, todo se salió de control cuando uno de los tipos agredió a la compañera reportera que nada más hacía su chamba.
Eso no puede pasar por alto, no se puede permitir que hasta un porro pagado por alguien agreda a las mujeres reporteras ni a nadie, y menos cuando están haciendo su trabajo. Obviamente se tiene que sancionar a ese tipo, que presuntamente es uniformado e iba a hacer el desorden, principalmente, para desviar la atención de los temas importantes en materia de seguridad.
Chantajes albiazules
Hasta hace unos meses nadie habría pensado que Boca del Río sería dominado por otro instituto político que no fuera el PAN, sin embargo, tras los últimos acontecimientos y giros políticos se eligen varios aspirantes a la presidencia municipal.
El PAN está en decadencia y quedaría marcado tinto en sangre que Juan Manuel Unanue sería el alcalde que entregaría el poder blanquiazul tras más de 20 años de supremacía.
La disputa seguramente será entre dos mujeres, la que elija Morena y la que salga de una férrea lucha interna en el PAN. A Juan Manuel Unanue sus empleados de confianza y jefas de cuartel se lo han puesto muy claro: si Indira Rosales es la candidata trabajarán con todo para lograr la victoria, en cambio, si es Maryjose Gamboa, dejarán que Morena pase tranquilo y se adueñe de Boca del Río.
Piñatas naranjas
En Movimiento Ciudadano también se están pegando con el palo de la piñata para lograr la candidatura a la presidencia municipal de Boca del Río, desde el altiplano buscan que el «Chino», Adrián Ávila, vuelva a ser alcalde boqueño.
Los liderazgos del partido naranja en Boca del Río están sumamente inconformes, pues ellos como parte de la dirigencia estatal han acusado al actual diputado local plurinominal de vivir durante los últimos 15 años de Movimiento Ciudadano, ejemplo claro fue la pasada campaña política donde no caminó, no invirtió un solo peso y obtuvo la primera posición para una curul en el Congreso de Veracruz.
Movimiento Ciudadano ha crecido sustancialmente su número de votantes en las pasadas dos elecciones y se estima que finalmente puedan lograr una alcaldía de peso en el próximo proceso electoral, por lo cual apuntan sus canicas a Boca del Río, donde también han sondeado el liderazgo del expriista Raúl Zarrabal para que sea su abanderado.