“El Apestado” Ríos Uribe
Bogar contra el primo
Los “enjuagues” de Esteban Acosta
Por Redacción
“El Apestado” Ríos Uribe
Mal y de malas le salió la jugada al expresidente de la Mesa Directiva del Congreso Local, Ramón Ríos Uribe de increpar a su propio partido Morena, ante los Tribunales Electorales; encaprichado porque no obtuvo la candidatura a la alcaldía de Córdoba, Ríos cacareó en sus redes sociales y en medios de comunicación que exigía vía tribunal la anulación de todos los procesos de selección de candidatos a presidencias municipales.
Este acto jurisdiccional, político y mediático no cayó nada bien en Palacio de Gobierno, por lo que desde la oficina de Cuitláhuac García y desde la de Eric Patrocinio Cisneros se giró la instrucción de en el Congreso Local “vetar” por completo lo que resta de la actual legislatura al morenista, Ramón Ríos.
Al diputado cordobés le faltó “altura de miras” y “ver la paja en el ojo ajeno”, pues habrá que recordar que por traidores y por revoltosos, la excontralora, Leslie Garibo, la exdirectora del DIF, Rebeca Quintanar y el ex subsecretario, Diego Castañeda con la mano en la cintura fueron relevados del gobierno de la cuarta transformación.
Bogar contra el primo…
Aunque pareciera que en Alvarado todo debería estar puesto para buscar que el Verde continúe en la administración municipal; el actual alcalde, Bogar Ruiz Rosas, no perdona que hayan bajado de la lista de ediles a su «brazo derecho», Maryant Rojas.
Desde hace días, el ingeniero, como le gusta que le llamen, no contesta el teléfono al equipo de campaña de Lizzette Álvarez Vera.
Aun así, busca a toda costa, que no gane su primo, Octavio Ruiz Barroso, a quien apodan en Alvarado, «Tavo Ruin», por el desdén con el que trató a quienes le dieron el voto en 2014.
Esta semana, promovieron con sus cercanos que volvieran a mostrar que existe una denuncia ante la FGE de 2019, sobre la no aplicación de recursos en 2016 en el mercado 20 de noviembre, por lo cual generaron una sanción de la Secretaría de Economía.
A Bogar Ruiz Rosas, no le importa quien gane, siempre y cuando no sea su primo que, así como él, buscará raja política de sus pifias en el poder.
Los “enjuagues” de Esteban Acosta
Damián Hernández iba como candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a la presidencia municipal de Rafael Lucio, ya estaba autorizado por la militancia, pero Esteban Acosta Lagunes, dio millón y medio de pesos para que lo bajaran y así meter mano por tercera ocasión en la administración del ayuntamiento de dicha demarcación.
Cabe recordar que Esteban Acosta ha perdido dos veces su búsqueda de ser diputado federal y local. Se trata de un político menor que ha estado involucrado también en temas de corrupción, incluso, cuando fue alcalde de Banderilla por el extinto partido Alternativa Veracruzana (AVE) heredó una obra “fantasma” en la administración municipal, misma que contemplaba la remodelación de la antigua fábrica de cal, para la adecuación de un salón de actos y eventos.
Se trata del mismo sujeto que, luego de dejar embarcados a los banderillenses, el 1º de julio de 2018, apareció en las boletas electorales del Distrito de Coatepec como candidato a la diputación federal por la alianza entre el Partido Acción Nacional (PAN), Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadana (MC), un claro ejemplo de “chapulín” dentro de la política veracruzana.