Corrupción, ignorancia y desatención acaban con los ríos y lagunas de Veracruz; contaminación de los cuerpos de agua en su máximo nivel

0
489

Tras la extinción de la laguna El Farallón en el municipio de Actopan, investigadores del Instituto de Ecología (INECOL), alertaron que desde hace 10 años la extracción ilícita del agua era constante. 

La investigadora Patricia Moreno Casasola, recordó que en 2003 se presentó un estudio en el que se observó de dónde provenía el agua de ese sitio que se abastecía de lluvia y escurrimientos; pero el vital líquido era usado para riego a cultivos de caña. 

 “El principal problema es que no es un cuerpo que esté regido por Conagua porque no se le concede aguas nacionales entonces ni el municipio ni el estado se han hecho cargo de él. Quien daba en ese momento los permisos para la extracción de agua era CFE por lo tanto era un control económico, pero no ambiental”, dijo. 

La especialista, explicó que se trata de un hecho de usos y costumbres puesto que incluso se pagaba a la Comisión Federal de Electricidad por el uso de la energía eléctrica y no por el permiso de agua, es decir, ninguna autoridad se ha hecho responsable de ella. 

Consideró que alguno de los tres niveles de gobierno tendrá que asumir el manejo de la laguna y revisar qué cantidad de agua tiene, quiénes la están extrayendo y en qué cantidades. Además de hacerse responsables de los daños ocasionados. 

“Fue al mismo tiempo que también se dio el problema de las lagunas interdunarias del puerto, ahí  el municipio de Veracruz sí se hizo cargo de las lagunas y se hizo área protegida posteriormente y en el caso de esta laguna, ni el municipio ni el estado decidieron tomar las atribuciones para manejarla, entonces es un cuerpo de agua en tierra de nadie”. 

La laguna el Farallón, era abundante en especies acuáticas y escenario para actividades ecoturísticas, además un importante lugar, pues es un corredor de aves y ahí bajaban a beber agua. 

Ahora se ha convertido en barro, y el panteón de miles de especies marinas, aunque se espera que con la temporada de lluvias vuelva a resurgir, aunque ya no será lo mismo. 

“Se va a rellenar con las lluvias, dependiendo de cuántas lluvias tengamos, pero si se hace un buen manejo a lo largo del tiempo, puede mantenerse ahí el agua, es lo que se debe hacer”, abundó. 

Los pobladores señalan, que a esto se sumó el cambio climático, que ha provocado intensos periodos de estiaje en años recientes; la extracción de agua en pozos cercanos para exploración minera y la sobreexplotación de agua en ranchos ganaderos que marcó el fin de la laguna. 

Apenas la semana pasada, el gobernador del estado, afirmó en el Programa  “A 8 Columnas” de Radiotelevisión de Veracruz que habrá denuncias en contra de quien hizo uso indebido del agua de la laguna de El Farallón, aseguró que el Gobierno del Estado no dejará sin castigo a los causantes del ecocidio: “En el caso de la laguna El Farallón se tiene identificado a los causantes de la desecación de la laguna, por lo que se procederá judicialmente en su contra, no se dejará sin castigo este acto que se estima tiene años en práctica y ha deteriorado el cuerpo de agua, de acuerdo a los estudios que se han hecho, por lo que el Gobierno del Estado no dejará de trabajar para recuperar esos espacios”, afirmó.

Ríos, arroyos y lagunas de Veracruz totalmente contaminados, investigadores advierten graves problemas ambientales 

De acuerdo al académico de la facultad de Biología de la Universidad Veracruzana (UV) Margarito Páez Rodríguez, la totalidad de los ríos en el territorio veracruzano están contaminados y por ello hay poca disponibilidad de agua para uso doméstico, además conforme pasa el tiempo cada vez hay mayor escasez, a ello se le suma el estiaje. 

Son 18 los ríos que atraviesan la entidad y que contienen fuertes contaminantes que provienen de la industria petroquímica, textilera, alimentaria, fertilizantes y gases, papelera, curtido de piel, refresquera, cítrica, lechera, fibra sintética, química, farmacéutica, cervecera, así como de ingenios azucareros, beneficios de café y aguas negras municipales que a su vez llegan a las aguas del Golfo de México, lo cual ha impactado de manera grave en los cuerpos de agua de Veracruz principalmente. 

Desde hace varios años se ha alertado sobre el problema de contaminación no sólo en los ríos Atoyac y Blanco, sino en todos los existentes en el Estado. 

La situación de esos ríos se debe en gran medida a los desechos contaminantes de las industrias, pero también a la irresponsabilidad ciudadana. 

Moreno Casasola, señaló que se han realizado diversas investigaciones, incluso han planteado proyectos de rescate del agua; sin embargo, hay poco interés de los gobiernos en invertir en propuestas sustentables que coadyuven a disminuir la contaminación. 

Las grandes industrias, los hoteles, los ingenios azucareros son uno de los sectores principales que han afectado las aguas de Veracruz; donde en la mayoría de las veces las mismas autoridades son las que otorgan los permisos para que los desechos y aguas negras vayan directo a estos sitios. 

Contaminación del agua atrae severos problemas de salud; falta de cultura en la sociedad acaba con los mantos acuíferos 

Existe una falta de cultura de la sociedad en estos temas, la población aun no entiende que este recurso natural podría ser la causa de enfermedades graves ante los desechos que se arrojan por el mismo humano. 

En diversas ocasiones se ha alertado por esta situación, pues médicos han detectado que el agua contaminada es el factor de enfermedades renales e incluso del desarrollo de células cancerígenas, entre otros padecimientos, y que si no se realizan acciones al respecto podría volverse un problema de salud pública. 

“Hay muchos lugares donde la gente arroja todo tipo de desperdicios, incluidas materias fecales, a los cuerpos de agua como arroyos o arroyuelos. Y casi en el mismo sitio donde vertieron esos desechos, lavan sus trastes, su ropa, se bañan y toman de esa agua, lo cual les atrae problemas de salud irreversibles en muchas ocasiones”, expresó Patricia Moreno. 

Y es que, los ríos que no están contaminados por petróleo o residuos tóxicos de las industrias, lo están por basura, animales muertos, vidrio, plástico y por todo lo que ya no sirve; estos mantos acuíferos se han convertido en basureros, donde nadie quiere hacerse responsable. 

“Los residuos tóxicos son los más peligrosos para el humano, se han tenido estudios, donde enfermedades del riñón, el cáncer, enfermedades intestinales son por consumir agua contaminada (…) la gente no tiene la cultura de un cuidado, para ellos es muy fácil tirar todo a los ríos y para las grandes empresas aunque sepan del daño que ocasionan no les importa”. 

Las cuencas hidrográficas de Veracruz deben ser prioridad en la agenda gubernamental, debido a que son un rubro importante no únicamente para el mantenimiento y mejora del medio ambiente, sino para el desarrollo de los pueblos y de la protección de la salud. 

Instituciones y asociaciones han denunciado el robo del agua, el apoderamiento de la industria, el arrojo de sustancias fuertemente dañinas para la fauna y flora marina, además de la ineptitud de la autoridad, y pese a que se ha hecho visible, esto no para, pues otro punto que es sumamente influyentes es la corrupción entre las empresas y el propio gobierno.