Ambientalistas protestaron durante este fin de semana sobre la carretera de la localidad de Palmas de Abajo, municipio de Actopan, para exigir que cese la construcción de la granja avícola en la zona.
Los quejosos indicaron que la granja “Nuestra Señora de Guadalupe” podría contaminar el arroyo “El Coyolito” que desemboca en la laguna de La Mancha, en el litoral del Golfo de México.
Frente a la construcción se plantaron los activistas, quienes fueron encarados por trabajadores que les pedían que se retiraran de la zona y los acusaban de haber roto los sellos de clausura.
En esta protesta, participaron los ambientalistas, entre ellos el Ecologista Universal, acompañado de ciudadanos, que se acercaron al sitio.
Desde la orilla de la carretera evidenciaron mediante un video en el cual hacen hincapié de las consecuencias de la construcción de la granja.
Dos de los trabajadores salieron de la obra y se dirigieron hacia los manifestantes para tratar de intimidarlos.
“Están allanando (…) no vengan a alterar el orden. Y yo creo que los intereses que ustedes tienen, es igual que el de nosotros y es válido, si para ustedes hay ley, también hay para todos (…) les pedimos de la manera más atenta que se retiren”, expresó uno de los trabajadores a los ambientalistas.
Los activistas continuarán en la lucha para exigir a las autoridades correspondientes que cese la obra de la granja avícola.
Las autoridades han dado a conocer que la obra había sido clausurada temporalmente mientras se llevaban a cabo nuevas revisiones para medir el impacto ambiental en la zona.
Sin embargo, los manifestantes acusaron a los trabajadores de la obra de haber retirado los sellos de clausura para continuar con las labores de dicho proyecto.
La granja tendría 11 naves, donde pretenden producir 320 mil pollos por cada ciclo de engorda, lo cual ocurrirá al término de cada 50 días, refiere la información del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA).