En Nuevo León se registró la muerte de un bebé de mes y medio de edad a causa de la tos ferina, informaron autoridades de salud estatal.
La secretaria de Salud de Nuevo León, Alma Rosa Marroquín, informó del deceso por esta enfermedad que complica el sistema respiratorio.
Cabe destacar que esta es la primera muerte por tos ferina en la entidad, cuyo rango de afectación impacta más a bebés recién nacidos y menores de cinco años de edad, detalló la doctora.
Marroquín dijo que actualmente el sector salud reporta en la localidad un total de 35 casos activos, por lo que se está evaluando la cifra, teniendo en cuenta que la misma va en incremento a nivel nacional.
“Estamos intensificando nuestras estrategias de vacuna, tenemos un fallecimiento de un bebé de un mes y medio”, declaró.
Por otra parte, Alma Rosa Marroquín, dijo que bajaron los casos de neumonía a mil 631.
“Vamos a estar vigilantes de todas estas enfermedades que están relacionadas a la contaminación. Hay infecciones que de forma conjunta causan una enfermedad en el paciente. El comportamiento ha sido el esperado. Ahora sabemos qué hay este tipo de contaminantes y podemos asociarla a la contaminación y a los demás factores y a los estilos de vida”, agregó.
¿Qué es la tos ferina y cuáles son sus síntomas?
Es una enfermedad infecciosa altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis y en los bebés puede provocar discapacidad permanente e incluso la muerte; se observa con mayor frecuencia en niños menores de 12 años, pero mayores de 3 meses.
Esta enfermedad se adquiere cuando se tiene contacto con secreciones de las vías respiratorias de una persona infectada; aproximadamente entre una y dos semanas después se presentan síntomas de un resfriado común como secreción nasal, fiebre y tos ocasional que poco a poco se vuelve más severa.
Esta tos es muy fuerte, genera dificultad para respirar después de un ataque de tos con un silbido característico. Estos ataques de tos ocurren con mayor frecuencia durante la noche y dificultan actividades como comer o beber y pueden durar hasta 10 semanas.
El tratamiento de esta afección consiste en la administración de antibióticos y en muchas ocasiones es necesaria la administración de líquidos por vía intravenosa cuando los ataques de tos son severos.
Los bebés son los que tienen un mayor riesgo de muerte y complicaciones debido a que la respiración puede detenerse temporalmente durante los ataques de tos.
En nuestro país es posible prevenir esta enfermedad mediante la vacunación; la vacuna pentavalente acelular protege contra difteria, tétanos, tos ferina, poliomelitis e influenza tipo B. Se administran 4 dosis a los 2, 4, 6 y 18 meses. La vacuna DPT se aplica como refuerzo a los 4 años protegiendo contra difteria, tétanos y tos ferina.
*EXCELSIOR