La lluvia no ahuyenta a nadie. Las miles de personas que se han congregado en el Zócalo de la Ciudad de México para presenciar el último Grito del presidente Andrés Manuel López Obrador, aguanta firme pese al intenso aguacero que azota el centro de la capital.
El ánimo no decae y en medio del chubasco los alumnos de la Banda Filarmónica del Centro de Capacitación Musical y Desarrollo de la Cultura Mixe (Oaxaca) interpretó un popurrí de canciones de Pedro Infante, provocando el júbilo de la gente que coreaba en altos decibeles.
“La gente no se va, no se va”, se escuchaba en distintos puntos de la plancha del Zócalo, como en un reto a la lluvia que no daba tregua.
Preparados con paraguas e impermeables, miles de personas que llegaron desde muy temprano a la plaza de la Constitución soportaron estoicos las inclemencias.
No se quieren ir, desean testificar el que será el último grito del tabasqueño, su última aparición en esta plaza pública, la que al menos en los últimos 25 años ha sido su espacio.
*LA JORNADA